El Gobierno de México anunció ayer que tomará medidas para liberar los bloqueos viales que mantienen profesores que se oponen a una reforma educativa, lo que podría recrudecer los enfrentamientos con las autoridades que ya han dejado varios muertos en el sur del país.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, dijo que el diálogo que mantiene con los maestros disidentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) no ha rendido frutos y que los bloqueos estaban afectando a la población civil.

“Se ha agotado el tiempo”, dijo Osorio en un mensaje a medios. “Muchas comunidades y miles de familias de Oaxaca y Chiapas se encuentran en una situación crítica”.

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“Los bloqueos y las afectaciones a la ciudadanía deben de terminar”, subrayó.

A finales de junio, al menos ocho personas murieron y decenas quedaron heridas en una localidad de Oaxaca en medio de enfrentamientos entre profesores y policías. (I)