Dentro del manual de gestión de riesgos y desastres naturales que ya tiene aprobado la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se plantea la opción de crear una oficina de coordinación operativa para que en caso de un incidente como el terremoto de Ecuador exista una respuesta rápida.

Así lo anunció ayer el titular de este organismo, Ernesto Samper, quien llegó junto con los cancilleres de los doce países que conforman la Unasur a recorrer las zonas devastadas, al igual que a ofrecer ayuda en Manta y Portoviejo.

En días pasados, el presidente Rafael Correa expresó el petitorio al propio Samper, quien agregó que incluso el Consejo de Defensa sudamericano ha estudiado la posibilidad de vincular una fuerza de tarea de respuesta inmediata para que en cuestión de horas con logística militar se pueda dar ayuda a las zonas afectadas.

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Destacó que se ha creado apoyo a través de una comisión de salud y adelantó que llegará también a la provincia una misión de expertos en valoración cultural que ofrecerá apoyo para la preservación de patrimonio cultural y además otra misión de viviendas que analizará el potencial de la caña guadúa en la ayuda.

El canciller Guillaume Long señaló que gran parte de la ayuda humanitaria ha provenido de países de Unasur, como agua, que del total, 86% corresponde al bloque; y el 60% del personal de rescate. (I)