El terremoto del 16 de abril, que afectó principalmente a Manabí y el sur de Esmeraldas, es una oportunidad para revisar la capacidad sismorresistente de las edificaciones, especialmente de servicios donde se ofrecen servicios públicos, como los hospitales. Así lo señala Lucio Sánchez Sarmiento, ingeniero ecuatoriano especializado en ingeniería sísmica y diseño sismorresistente de edificios.

Este especialista, quien trabaja en diseño de edificios en Chile, donde se radicó hace casi una década, cree que el terremoto deja una enseñanza: "Demuestra la necesidad de enfrentar este tema a nivel nacional, con una evaluación de la condición de resistencia sísmica real de los centros hospitalarios para identificar potenciales deficiencias y estudiar alternativas de reforzamiento o repotenciación de estas estructuras. Experiencias de este tipo de intervenciones existen a lo largo de todo el mundo".

Sobre qué tipo de material debe ser prioritario para la construcción de nuevas edificaciones, luego de que muchas viviendas y edificios colapsaran o quedaran inservibles en Pedernales, Portoviejo, Manta y otras ciudades, Sánchez cree: "El hormigón armado, construido de manera adecuada y con estructuraciones sanas ha demostrado ser muy bueno para resistir fuerzas sísmicas, tanto así que la mayor parte de estructuras sismorresistentes que se construyen en el mundo son de hormigón armado".

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Sin embargo, el especialista recuerda que más allá de los materiales que se usen, es importante que se usen las técnicas necesarias para hacer que esa edificación resista los sismos y terremotos. "Por ejemplo se pueden construir casas o edificios bajos de hasta 3 o 4 pisos, en donde la materialidad principal que resiste las cargas sea el ladrillo y el hormigón armado y alcancen una condición bastante buena para resistir terremotos. Las técnicas de construcción y diseño antisísmico de este tipo de estructuraciones están disponibles y hay mucha experiencia desarrollada en países como Perú y Chile".

¿Reconstruir las ciudades junto a donde están ayudará en algo a mitigar los daños en un futuro evento como el del 16 de abril? Sánchez considera que no porque el terremoto del 16 de abril ocurrió por un "fenómeno de subducción de placas tectónicas que en general es el mismo mecanismo de falla que ha causado grandes terremotos a lo largo de la historia en Colombia, Ecuador, Perú y Chile".

"Resulta claro que las potenciales zonas de ruptura de estas placas están más o menos distribuidas a lo largo de toda la costa ecuatoriana. La probabilidad de ocurrencia de terremotos de este tipo está más bien asociada al número de años en que no ha ocurrido la ruptura entre estas placas", aclara el especialista a EL UNIVERSO.

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Por eso él insiste en la importancia de contar con un profesional para la construcción. "La existencia de un profesional o empresa encargada de hacer el diseño estructural de las edificaciones y la existencia del requisito formal y obligatorio de la participación de otros profesionales o empresas que verifiquen y certifiquen que los diseños se ajustan a la norma de diseño sísmico. Esto existe por ejemplo en Colombia para cierto tipo de edificaciones y en Chile para todos los edificios". (I)