Argentina volvió este martes al mundo financiero tras un exilio de 15 años y colocó deuda soberana por 16.500 millones de dólares para pagar a fondos especulativos y sostener las arcas del gobierno.

"La mancha del 'default' de 2001 (por casi 100.000 millones de dólares) se cierra definitivamente", dijo el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, en rueda de prensa.

El ministro reveló que "el viernes, cuando se acrediten los fondos en nuestra cuenta, pagaremos 9.300 millones de dólares. Logramos 220 acuerdos con 'holdouts' de distinto tamaño".

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La tasa promedio pactada es de 7,2%, para títulos cuyo tiempo de maduración será de 3, 5, 10 y 30 años, precisó el jefe del área económica del presidente Mauricio Macri.

"Dos terceras partes de los inversores son de Estados Unidos. Un cuarto son europeos y un 5% del Lejano Oriente. Otro 5% son de América Latina", dijo Prat-Gay.

El ministro sostuvo que ahora "puede zarpar sin temor a ser embargada la fragata Libertad", nave insignia del país, confiscada en Ghana en 2012 por el juicio en Nueva York y luego devuelta a Argentina por orden de un tribunal internacional.

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Antes de anunciar el resultado de la operación, Prat-Gay había dicho que la emisión argentina tuvo "la demanda más grande de la historia en un mercado emergente y está entre las veinte más grandes de la historia para una emisión".

La demanda de bonistas por invertir llegó a 69.000 millones de dólares, precisó. "Es un buen retorno de Argentina a los mercados de capitales tras quince años de ausencia", dijo en París Jean-Marc Mercier, responsable del sector de obligaciones del HSBC, uno de los siete bancos a cargo de la operación.

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El arreglo, sin embargo, no alcanza a la totalidad del 7% de bonistas con títulos en mora. Quedarán afuera valores por 3.500 millones de dólares en litigio en Nueva York. El 93% restante se acogió a los canjes de 2005 y 2010.

Los bancos colocadores fueron el Deutsche Bank, HSBC, JP Morgan, Santander, BBVA, Citigroup y UBS.

Macri, de centroderecha, celebró el lunes "haber salido de años de conflicto financiero con el mundo".

Los bonos se emitirán bajo jurisdicción de Nueva York. Allí obtuvieron fallo favorable acreedores que rechazaron las reestructuraciones de 2005 y 2010.

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Elevada inflación 

Argentina cierra su conflicto judicial, pero en el plano interno afronta una situación económica difícil.

Macri pidió "austeridad" a los argentinos el lunes y "responsabilidad" a los empresarios a la hora de fijar sus precios y "cuidar a cada uno de sus empleados".

El gobierno admite haber despedido a 11.000 empleados públicos y los sindicatos ubican en unos 100.000 el total de despedidos en los sectores estatal y privado.

Estimaciones privadas ya calculan en 40% anual la inflación. El gobierno aún no anunció medidas concretas para paliar la escalada de precios ni los bruscos aumentos de tarifas en agua, gas, electricidad y transporte que van de 100% a 700%.

Los incrementos no fueron acompañados por recomposiciones salariales, por lo que las centrales obreras realizan protestas en las calles y huelgas sectoriales. (I)