Con siete votos de los legisladores de AP, la Comisión de Soberanía y Relaciones Internacionales de la Asamblea decidió ayer declarar reservada una jornada de comparecencias, en el proceso de investigación de la compra de los siete helicópteros Dhruv, que hizo la FAE.

Ninguno de los siete oficiales de la FAE convocados, quienes pilotearon cuatro de las naves accidentadas, asistió. Solo acudió el excomandante Leonardo Barreiro, quien participó en la adquisición.

La presidenta (e) de la mesa, Dora Aguirre (AP), justificó que se iban a tratar “documentos clasificados” relacionados con los informes de los siniestros.

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La decisión irritó a los legisladores Fernando Bustamante (antes de AP), Diego Salgado (CREO), y Milton Gualán (PK), que abandonaron la sesión.

Bustamante intentó argumentar por qué la ley de la Función Legislativa no permitía este procedimiento, pero Aguirre no le dio la palabra y evadió su pedido.

“Cuando yo era presidente de la Comisión consulté si se podían hacer sesiones reservadas, y el CAL me dijo que ¡no se pueden hacer sesiones reservadas en las comisiones!”, precisó el legislador, quien abandonó la comisión, y les dijo que “no podía ser parte de una ilegalidad”. Salgado coincidió con este criterio, al que se unió Gualán y salieron de la sala.

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Barreiro compareció solo ante los asambleístas de AP; y a su salida zanjó que “todo fue legal” en la compra, y se rehusó a referirse a los accidentes. “Revisen los informes de las Juntas Investigadoras de Accidentes. No voy a emitir un solo criterio de eso”, dijo.

Patricia Ochoa, viuda de Jorge Gabela, excomandante de la FAE que se opuso a la compra y fue asesinado en el 2010, cuestionó: “Para asesinar la honra de mi esposo, ahí sí no hubo reserva” en las sesiones. (I)