Movilizaciones en varias ciudades del país, foros públicos y reuniones reservadas son algunas de las acciones que los gremios de militares en servicio pasivo desarrollan desde hace más de dos meses para “defender” el patrimonio del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa).

Aunque estos grupos tienen ya varios años organizados para buscar mejoras en las prestaciones del seguro militar, alzaron sus voces en las calles tras la polémica que surgió con el anuncio del presidente Rafael Correa de pedir la devolución de un supuesto “exceso” de $ 41 millones en el pago por unos terrenos que el Issfa vendió al Ministerio del Ambiente para levantar el Parque Samanes.

Correa tomó esta decisión con base en un pronunciamiento de la Procuraduría que señaló que se debía revisar y corregir el contrato. Los directivos del Issfa no aceptaron hacerlo porque, según este, la vía prevista era la judicial.

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Actualmente, la Contraloría realiza un examen especial al proceso de compraventa.

No se conoce un número exacto, pero los dirigentes de los militares retirados hablan de la existencia de centenares de estas agrupaciones con exmiembros de las tres ramas de las Fuerzas Armadas (Naval, Terrestre y Aérea).

La Confederación Nacional de Militares en Servicio Pasivo y Montepío República del Ecuador es la más grande; reúne a cinco federaciones que, a su vez, reúnen como mínimo cinco asociaciones provinciales o regionales. El total de integrantes de cada asociación fluctúa entre diez y cien personas.

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Su presidente, Carlos Urbina, dice que de forma pacífica y con diálogo defenderán al Issfa.

“Estamos preparados para cualquier situación, para enfrentar cualquier desestabilización de los gobiernos de turno”, expresa él, refiriéndose no solo a la situación del Issfa sino también a la cercanía del debate en la Asamblea del proyecto del Libro IV del Código de Seguridad Ciudadana que modificaría la estructura de los cuerpos de seguridad, entre ellos las FF.AA.

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?Ciro Salvatierra es presidente de la Asociación de Militares en Servicio Pasivo Libertad, que reúne a 120 socios.

“Hemos participado en estos días en marchas para reclamar nuestros derechos, en apoyo a la institución y defensa al seguro social”, comenta él, quien agrega que también se quejan de que no se han homologado sus pensiones desde el 2006.

Para mantener la coordinación entre los gremios se ha creado el denominado Frente de Defensa de las Fuerzas Armadas. No tiene un presidente, sino voceros como el coronel retirado Fausto Cobo.

Él explica que este no es un órgano de masas, pero sí de “facilitación de la información, de la toma de decisiones”, al que se han sumado 200 asociaciones.

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“Es un frente para defender el prestigio de las FF.AA. de este Gobierno, que tiene un discurso perverso en contra de la institución y el Issfa”, dice.

El Frente ha emitido, en las últimas semanas, varios comunicados en los que advierte que estarán “unidos por la familia militar y el rescate de las gloriosas Fuerzas Armadas”; y rechazaron el “plan orquestado del Gobierno que pretende soslayar las bases éticas y morales de los soldados”.

Los pensionistas coinciden en que esperarán los resultados de la auditoría de la Contraloría para acudir a la justicia y evitar el débito al Issfa. (I)