Los 61 kilómetros entre el cantón Gualaceo, en Azuay, y el Plan de Milagro, cantón Limón, en Morona Santiago, tiene tramos en los que se vuelve difícil transitar por los baches, hundimientos y deslizamientos de distintas magnitudes que se evidencian actualmente.

Esto se habría intensificado con las lluvias recientes en esta zona montañosa, que tiene sus primeros 23 kilómetros con características de páramo hasta el sector conocido como la gruta de la Virgen, en Azuay; y en los 41 kilómetros restantes que tiene particularidades de la selva amazónica.

En las últimas semanas se han generado varios deslizamientos, el de mayor magnitud en el kilómetro 42, conocido como Tinajillas, donde maquinaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas está permanentemente para limpiar y habilitar el tránsito, como ocurrió la semana anterior.

Publicidad

Los moradores de la zona piden contar con la carretera que les permita la comunicación entre las dos provincias en menos de tres horas, como se les ofreció hace cuatro años cuando se hizo un primer contrato con la compañía Hidalgo-Hidalgo para la reconstrucción y mantenimiento de la vía.

“En 2012 había más de 20 volquetas trabajando en la parte del Plan (de Milagro) y otro tanto en la salidita de Gualaceo, después de un año ya no había nada, hace dos años también volvieron las máquinas, terminaron de construir puentes, pero desde el año anterior no hay nada”, dijo Dolores Álvarez, habitante del lugar.

Manuel Sánchez, otro morador, indicó que los accidentes son constantes por el mal estado de la vía y que todos estos inconvenientes afectan a los conductores.

Publicidad

Son unos $46’000.000 que se entregaron a dos contratistas para que realizaran la reconstrucción de la misma y el mantenimiento por un par de años, pero no se cumplió, dijo Boris Palacios, subsecretario del MTOP de la zona 6.

Primero se contrató a la compañía Hidalgo-Hidalgo, y le entregaron $ 40’000.000; mientras que en el 2014 se contrató al consorcio Gualaceo-Limón y se le proporcionaron $6’000.000 aproximadamente, según el funcionario.

Publicidad

Palacios reconoció que la irregular y complicada geografía y topografía de los terrenos dificulta las obras, por esa razón se rescindió el contrato con el consorcio y aún falta por conocerse el resultado de la liquidación con esa contratista, desde octubre del año anterior.

El ministro de esta cartera de Estado, Walter Solís, recorrió la obra el jueves anterior y dijo que se liquidó el contrato con el consorcio Gualaceo-Limón y que se volvió a contratar a Hidalgo-Hidalgo para que termine la reconstrucción en 18 meses, a partir de abril próximo.

El nuevo contrato es por $10’000.000, de forma que el costo final de la obra será de $55’000.000 tras los reajustes que debieron hacerse, aseguró el funcionario, quien además solicitó que intervenga Contraloría para analizar los procesos de liquidación anteriores.

Mientras, los usuarios piden que se agiliten los trabajos.(I)

Publicidad

Afectaciones
Carretera

Transporte
Entre los transportistas hay quejas por el estado de la vía. Édgar Quilla, conductor de un bus de la cooperativa Turismo Oriental, dijo que por cada viaje se deben hacer arreglos a los vehículos que cuestan entre $ 80 y $ 200.