El excomandante de la Marina Livio Espinoza dice que la renuncia de Fernando Cordero al Ministerio de Defensa se dio por malestar en el nuevo alto mando, tras el conflicto por la devolución exigida al Issfa del supuesto pago en exceso por terrenos vendidos al Estado. Los militares en retiro esperan ver cómo actúa Ricardo Patiño.

¿Por qué cree que se generó ese malestar con Fernando Cordero?
Como presidente del Consejo Directivo del Issfa él estaba llamado a defender(lo), pero se opuso a las opiniones de otros miembros y llevó al presidente a tomar una decisión para que se quite el dinero de la venta de los terrenos del parque Samanes.

Pero fue el secretario jurídico, Alexis Mera, quien pidió, hace tres años, que se revise la venta de los terrenos. Por eso elevó la consulta a la Procuraduría, que señaló que debía corregirse el contrato y el Issfa no acogió esto.
El procurador general sugirió una forma de solucionar el problema, pero no era de obligatorio cumplimiento. El contrato que tiene cláusulas claras dice que de haber controversias se irá a un juez.

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Cordero dejó firmados un par de acuerdos para eliminar inequidades que, según Correa, se dan en las FF.AA., como comer en sitios y vajillas diferentes, o el sistema de ingreso a las escuelas militares. ¿Qué opina de eso?
A las FF.AA. hay que conocerlas para decidir sobre ellas. En todo el mundo, la institución se rige por una estructura de jerarquía (...).

Me molesta que se diga que los oficiales hemos tenido un trato discriminatorio hacia nuestra gente si más bien hemos trabajado por ellos para darles bienestar. No es que uno come diferente, es lo mismo. O que estamos en sitios separados, los buques son así. En las FF.AA. se requiere respeto, porque si vamos a debatir las órdenes de los que deciden, no se podría manejar una fuerza...

¿El Gobierno no conoce la estructura militar?
Han pasado nueve años y no la conoce. Eso es preocupante. Cuando uno lidera una fuerza debe mantener la unión, un liderazgo que genere respeto... Elegimos un presidente para que nos dirija como una Patria unida. Pero vemos que ha dividido a los trabajadores, empresarios, políticos, a los indígenas. Ahora nos toca a nosotros.

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¿Qué esperan de la nueva cúpula?
Cuando hablo con ellos les he pedido que sean pacientes. prudentes y sabios. Si no lo son se va a destruir a la institución, pues se empezarán a descabezar los mandos (...). Esperar hasta que termine el Gobierno, que es lo que quiere todo el pueblo ecuatoriano. Las FF.AA. no quieren meterse en ninguna aventura de golpes de Estado, pienso yo, hablándole del lado pasivo. Es lo que veo de la actuación de los activos. Las FF.AA. ya han madurado. (I)