Una cosechadora y dos transportadoras son las encargadas del retiro de los lechuguines en el espejo del embalse de la represa de Río Grande, ubicada en Chone, Manabí.

Las tres barcazas pertenecientes a la Empresa Pública del Agua (EPA) llegaron desde la presa Chongón, donde estaban prestando este servicio. Los trabajos en Río Grande iniciaron el jueves último y prevén hacer la limpieza en una extensión de unos 8 kilómetros.

Lizet Arellano, encargada de los trabajos, dijo que llegarán a los sitios: Limón, Platanales, Coñaque, Cañitas, Ñarusa, El Aguate, Capilla de Coñaque, Sánchez, Juan Cayo, y otros que colindan con el embalse. Añadió que estas tareas tardarán entre seis y doce meses.

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El responsable de Gestión Social de la EPA, Javier Cedeño, dijo que se está mostrando a los agricultores sobre cómo realizar abono orgánico para los cultivos a base de lechuguines.

Cedeño señaló que se tramita la firma de un convenio con la Asociación de Agricultores de Río Grande para que doce personas realicen los trabajos de limpieza de los lechuguines con canoas y trasmallos.

El presidente de las comunidades campesinas de Río Grande, Elvis Suárez, aseguró que se han visto seriamente afectados por la falta de limpieza del espejo de agua, ya que no podían movilizarse en sus canoas.

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Agregó que también hay gran cantidad de madera y palizada del desbroce de árboles que no ha sido retirada. (I)