Con auditorio lleno, el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, presidió ayer una asamblea del Partido Social Cristiano (PSC) en Pichincha, en la cual se posesionó a Santiago Guarderas como director provincial y se presentó a La Cantera de la 6 como un espacio de formación de jóvenes líderes.

El acto estuvo matizado por la protesta de un grupo de personas que se ubicó afuera del edificio de la Cámara de Comercio. Mostraban pancartas con mensajes de rechazo a la presencia de Nebot en Quito.

La última vez que él estuvo en la capital en un acto público fue hace unos ocho años.

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El alcalde de Guayaquil inició su discurso agradeciendo a “los 37 individuos que estaban parados en la esquina con letreritos que se refieren a un viejo y mentiroso cuento, agradecerles porque he visto con mis ojos la escasa convocatoria del Gobierno Nacional”, subrayó.

Se refirió a los fracasos que, según él, ha tenido el Gobierno en lo económico, lo social, la democracia y los derechos.

Nebot dijo que en el país no hay democracia, sino un “control grosero” de todas las funciones del Estado por alguien que ganó legítimamente una elección, pero que no se puede ganar una elección con el 60% de los votos y tiene el control del 100% de las funciones del Estado. “Eso es abuso”.

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Agregó que en el país no hay seguridad jurídica para atraer a inversionistas y, sin inversión, no hay producción ni empleo.

El problema, explicó, no es el modelo y que el Gobierno ha fracasado, sino que el Gobierno con ese fracaso “ha arrastrado” el futuro y el éxito de los ecuatorianos. “El gobernante que se equivoca no paga la factura, la factura la paga el pueblo, la pregunta es ¿hasta cuándo? Ya no más, conciudadanos”, replicó.

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Hasta el auditorio de la Cámara llegaron los principales líderes del partido, como Pascual del Cioppo, Carlos Falquez, Nicolás Lapentti, Luis Fernando Torres, Henry Cucalón, Doménica Tabacchi, y otros.

La legisladora Cynthia Viteri, en cambio, convocó a las mujeres a participar en la defensa del futuro de sus familias.

“Las quiero en las calles, las quiero como opositoras, como espías, como luchadoras, como activistas, desde las calles, desde las plazas, desde sus casas”.

En tanto que Guarderas dijo que en Pichincha se creará una escuela de formación política, pues “se necesita un partido permanente, no una organización política que aparece solo en elecciones”. (I)

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