“Decenas de personas” murieron el pasado jueves en la explosión de una planta de gas del sureste de Nigeria, anunció ayer el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari.

La explosión se produjo en la tarde en una planta de Inter Corp Oil Limited gas, filial del conglomerado Chicason Group, y provocó un incendio que duró cuatro horas y destruyó edificios contiguos.

Cuando los bomberos lograron sofocar las llamas, aparecieron cadáveres carbonizados en el suelo cubierto de cenizas, según medios locales.

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Las llamas destruyeron varios depósitos de gas, así como automóviles y bicicletas aparcados a proximidad de la planta.

Buhari aseguró en un comunicado que estaba “muy conmovido y conmocionado por tantas pérdidas humanas en un único accidente industrial”.

Un anterior balance policial mencionaba a ocho fallecidos en el accidente.

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“Era una enorme hoguera”, dijo el portavoz de la policía Ali Okechukwu, que precisó que seis personas resultaron heridas y tuvieron que ser trasladadas a un hospital.

“Las causas (de la explosión) aún están por determinar. Varias personas perdieron la vida. Algunas sufrieron quemaduras de distintos grados”, declaró el gobernador del Estado de Anambra, Willy Obiano, a la cadena Channels Television.

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Alimentado por el gas, el incendio se propagó de forma instantánea, dijo James Eze, portavoz de la agencia de situaciones de emergencia. (I)