Los niños fueron los más emocionados ayer durante el encendido del árbol navideño de 20 metros de altura que se erigió en el Malecón Simón Bolívar.

Lastimosamente, unas camaretas lanzadas en una zona cercana donde se desarrollaba una marcha de protesta de grupos contrarios a las enmiendas que se tramitan en la Asamblea Nacional provocaron preocupación entre los asistentes al encendido del árbol.

Allí en el Malecón de Guayaquil ya se vive la Navidad.  (I)