Esta semana, Renata Salvador, suplente del concejal de Quito, Antonio Ricaurte, asumirá el que era su despacho, al cual renunciará “por amor a su familia y a la ciudad”, tras la denuncia que entabló en su contra su colega Carla Cevallos por daño moral. Ricaurte, condenado a quince días de prisión (sanción que fue apelada), afirma que la alianza entre su movimiento VIVE y el del alcalde Mauricio Rodas, SUMA, se mantiene.

¿Cómo quedó usted en el movimiento VIVE?
Sigo como militante activo, pues soy fundador del movimiento, y ahora voy a las bases a estructurar, organizar y formar cuadros; a trabajar en los barrios en la estructuración de un grupo que sea más fuerte y sólido el distrito.

¿Este ‘escándalo’ afectó a las bases de la agrupación?
No, para nada, el miércoles de la semana pasada la gente pedía que no me vaya, diciendo que fue una miseria lo que me ocurrió. Y no fue un escándalo, sino un circo asqueroso, vamos a investigar quien lo propició.

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Tras su salida, ¿cómo actuarán los ediles de VIVE?
El movimiento va a trabajar en favor de la ciudad coincidiendo con el alcalde y con quien tengamos que coincidir por bien de Quito.

¿La alianza se mantiene?
Por supuesto, y esa decisión se ratificará en los próximos días tras reuniones y asambleas.

¿Y su relación con el alcalde Rodas cómo quedó?
Buena, Mauricio es mi amigo y por supuesto vamos a seguir trabajando por la ciudad, y el bloque de concejales está sólido en sus convicciones.

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Pero habían discrepancias con relación a la construcción del Metro de Quito...
Siempre habrá discrepancias y tiene que haberlas. En el tema del Metro ha sido más que obvia nuestra posición respecto al precio. Dijimos que no va a valer $ 1.500 millones sino mucho más; y ahora vale $ 2.000 millones. Nuestra preocupación es que ese precio se mantenga en el tiempo, que ese precio sea blindado; y nuestros concejales estarán vigilantes de que luego no haya un reajuste.

Pero como bloque dieron el voto para que el Municipio apruebe los créditos para la segunda etapa...
Dimos un paso adelante para que el Municipio pueda endeudarse para construirlo, pero siempre vamos a estar vigilantes que ese precio se congele, siempre estaremos molestando en aquello.

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¿Molestando en qué sentido?
Diciendo a Odebrecht (la constructora) que tenga cuidado con lo que va hacer porque no vamos a permitir que se incremente un solo centavo el precio. (I)