Un joven solitario, fascinado por las armas y con una fuerte aprehensión por “la religión organizada”. Esas son las características que, hasta el momento, se conocen de Chris Harper Mercer, quien ha sido identificado por varias cadenas de televisión, citando fuentes policiales anónimas, como el presunto autor de la matanza del jueves en una universidad en el suroeste de Oregón.

El sospechoso, que los testigos dicen que realizó decenas de disparos en una sala llena de estudiantes, murió durante un tiroteo con la Policía en el salón Snyder en el Umpqua Community College del poblado rural de Roseburg. El último reporte de la Policía dio cuenta de nueve fallecidos.

Harper Mercer vivía en un edificio de apartamentos situado a pocos minutos del campus universitario de Umpqua, en Winchester, a donde había llegado con su madre proveniente de Torrance, California. El joven “parecía muy hostil” y “se sentaba solo en la oscuridad en el balcón con una lucecita”, dijo Bronte Harte, un vecino.

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BBCMundo informa en su sitio online que, según reportes de The New York Times, sus vecinos lo describen como un joven retraído que siempre se vestía de la misma forma: con botas y pantalones militares y una camiseta blanca.

De acuerdo a esos mismos reportes, Harper Mercer era muy cercano a su madre, quien estaba divorciada y a la que sus vecinos describen como extremadamente protectora.

El vocero del ejército, el teniente coronel Ben Garrett, dijo que Harper Mercer estuvo casi un mes en el ejército, en Fort Jackson, Carolina del Sur, pero fue dado de baja por no cumplir con los requisitos mínimos.

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En el perfil para el sitio de citas por internet Spiritual Passions (Pasiones Espirituales), el joven se describe como un universitario introvertido de 26 años de edad, raza mixta, políticamente conservador y republicano, que vive con sus padres, añade BBCMundo.

Kortney Moore, de 18 años, indicó al diario local News Review que ella estaba en una clase en Snyder Hall cuando un disparo atravesó la ventana e impactó la cabeza del profesor.

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El padre de una de los sobrevivientes, según informa ,BBCMundo señaló que luego de entrar armado a uno de los edificios del campus, el atacante alineó a sus víctimas y les preguntó si eran cristianos. “Si decían que sí, les disparaba en la cabeza. Si decían que no, o no contestaban, les disparaba en las piernas”, expresó basado en el testimonio de su hija.

Ian, padre de Chris, manifestó el pasado jueves a KABC-TV y a otros medios reunidos ante su casa en Tarzana, California, que había sido un día devastador para él y su familia, y que había hablado con la Policía y el FBI sobre el tiroteo. Carmen Nesninck, su hermanastra, dijo a KCBS-TV que el hecho no tenía sentido. “Lo único que hacía siempre era poner a otros por delante de él, quería que todo el mundo fuera feliz”, agregó.

El jefe de Policía, John Hanlin, señaló que no iba a pronunciar el nombre del agresor. “No nombraré al tirador. No le daré el reconocimiento que probablemente buscaba antes de este acto horrendo y cobarde”.

Tenencia de armas
Las muertes en centros educativos han motivado demandas por un mayor control de las armas en Estados Unidos, donde la segunda enmienda de la Constitución protege el derecho a poseerlas, y un mejor cuidado de quienes padecen enfermedades mentales. (I)

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