Como si se tratara de la entrega de los premios Óscar, en la que en una alfombra roja los actores lucen sus mejores galas ante el público y paparazis, así se vivió la quinta edición del Match Canino del centro comercial Village Plaza, en la que artistas de cuatro patas caminaron por la pasarela entre aplausos, flashes de cámara y música acordes a los disfraces de la época de los ochenta que vistieron para participar en el concurso, el pasado sábado 19, en la explanada exterior del centro comercial.

La creatividad y emoción de los amantes de los perros se demostró en los trajes que les fabricaron a sus mascotas. Los brillos y los colores en telas con tonalidades fuertes y tules en tonos pastel, así como pulseras, cintillos, moños, vinchas, collares y hasta anillos no faltaron en las hembras, así como las chaquetas de cuero, spikes, peinados con pelos parados, trajes con corbata y hasta máscaras en los machos.

Hubo mucha variedad en tamaños y razas en los 26 participantes del concurso, como french poodle, shitsu, pug, bulldog, maltes miniatura, bull terrier, así como varios perritos rescatados y adoptados, que reencarnaron a diferentes cantantes, actores y personajes de películas de la época.

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Al son de la música ochentera, con barras de familias y gritos de emoción de los niños, estos amigos de cuatro patas hicieron su paso por la pasarela, algunas como verdaderas divas, captando la atención de los fotógrafos y otros un poco temerosos, pero acompañados de sus dueños.

La mayoría optó por reencarnar a cantantes de la época, ese fue el caso de Kramer, un basset hound de tres años, que con una chaqueta amarrada a la cintura, una peluca rubia y un cintillo atado por atrás de sus largas orejas cafés, representó a Axl Rose, el vocalista del grupo Guns N' Roses. “A mí me encanta este grupo de música y es por eso que pensé en esta alternativa, mi perro nunca ha participado en concursos, pero este evento me pareció una buena oportunidad para empezar porque es muy sociable con las personas y muy tranquilo”, dijo Carol Cárdenas, la dueña.

Él, luego de una preselección de 10 finalistas, obtuvo el primer lugar, junto a Pipa, una bulldog que con un traje de tul y un gran moño a un costado de su oreja y collares en su cuello, representó la moda de las cantantes de aquella época; y a Frank, un pug que con una camiseta verde militar sin mangas y ajustado un cintillo rojo en la cabeza y balas y granadas hechas con papel y plástico atadas a su cuerpo, obtuvo el tercer lugar como el único rambo de la pasarela.

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El jurado, conformado por Vanessa Lozano, representante de Pet Coquette; Jéssica Vargas, de Procan; y Mónica Cabrera, de Rescate Animal, entregó al ganador del primer lugar $ 500 en efectivo, un año de comida gratis y una orden de peluquería en Pet Coquette; así como una canasta con productos Procan y una orden de peluquería en Pet Coquette, para el segundo y tercer lugar.

Asimismo con un cintillo rosado y un traje brillante, Dakota, una shitsu de 10 años, representó a las cantantes del grupo Flans, y al son del tema No controles, caminaba y se dejaba fotografiar moviendo la cabeza. Siguiendo los pasos de su madre, Duke, hijo de Dakota, también participó con una moda rockera, con pantalón y chaqueta de cuero y una cresta de pelo pintada de azul.

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El grupo Kiss también se hizo presente con Ludovico, un bulldog que con una camiseta negra pegada al cuerpo representó a los integrantes del grupo y que con su cara de ‘malo’ caminaba a paso firme mientras se escuchaba I was made for lovin' you. Max y Baby llevaron a la pasarela a Michael Jackson, el primero fue la versión descolorada del cantante y el segundo la versión oscura. Ambos conquistaron los aplausos del público.

Los personajes de películas populares también fueron una alternativa para los canes como Linda, una perrita rescatada que dominó la alfombra roja con un desfile en dos patas, luciendo su traje de La Mujer Maravilla. Migaja, un french poodle, no se quedó atrás y con un traje negro y con capa representó a Darth Vader, de La Guerra de las Galaxias. Asimismo Copito provocó suspiros y gritos de los niños al pasar con su camiseta a rayas y su overol de jean, en su papel de Daniel el travieso.

En el evento hubo mucha organización, los perros tuvieron un área de hidratación hasta que el programa finalizó. La alegría de Úrsula Strengue, quien animó el evento, contagió a adultos y niños que disfrutaron del desfile bajo carpas que los protegían del sol.

Rescate animal se hizo presente con un estand de adopción con 4 de sus perros rescatados y un bazar animalista con productos temáticos variados como camisetas, pulseras, jarros, entre otros objetos. (I)

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Me gustó mucho porque se notó el amor que se tiene por los animales, y porque además este tipo de eventos promueve la integración familiar”.Karina Cevallos, Público