Rayuelas, tres en raya, trompos con números, abecedarios y letras en inglés resaltan con sus vivaces colores sobre el asfalto gris de la calle principal, que une a las manzanas 4002, 4004, 19 y 23 del barrio Las Palmas, en la cooperativa Pablo Neruda, en el Guasmo sur.

Estos juegos de antaño, sostiene Susana Alcívar, moradora de la cooperativa hace más de 30 años, son el nuevo pasatiempo de la mayoría de niños que ahora cuentan con un espacio para jugar sin alejarse de sus casas.

En las aceras, que lucen limpias ahora, se colocaron recipientes para la basura así como bancos de caña con cubierta, y maceteros con palmeras, ficus, crotos, isoras, girasoles, margaritas y rosas.

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“Mi hermano es el presidente de la cooperativa y trajo los folletos para organizarnos y participar en el concurso. Hablé con el grupo y me encargué de reunir a los vecinos”, sostiene Alcívar.

Treinta y cinco de las cuarenta familias que habitan en el cuadrante que se inscribió en la competencia unieron esfuerzos para restaurar las calles, fachadas y aceras del sector.

Jessenia Hernández, de 29 años, se encargó de elaborar cisnes de papel que están ubicados en una pequeña laguna artificial en la calle.

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“Es origami de papel, todos colaboraron para hacerlos, dónde están ahora los patos no había nada, estaba sucio”, dice Hernández.

La compra de materiales y pintura para las mejoras también motivó a encontrar fuentes de ingreso extra. Así, señala Betty Márquez, de 38 años, se reunieron para vender tortillas, morocho, arroz con leche, entre otros piqueos que cada una preparó y ofreció puerta a puerta en la zona.

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Los moradores, que ahora conforman un comité barrial, sienten que el cambio será completo con el aumento del resguardo policial en la zona, donde aseguran son frecuentes los asaltos y con la implementación de más luminarias.

“Vamos a hacer un fondo para seguir terminando la calle y hacer más arreglos, queremos construir bancos de cemento y hierro”, agrega Alcívar. (I)

Los arreglos los hicimos con el afán de cambiar nuestro barrio e integrar a la vecindad. El lugar es distinto ahora y hemos logrado unirnos para mejorar nuestra calidad de vida”.Adrián Alcívar, morador