Los griegos observaban ayer una jornada de reflexión, la víspera de unas legislativas apretadas entre el líder izquierdista Alexis Tsipras y el conservador Evangelos Meimarakis, que auguran unas negociaciones complicadas para formar gobierno.

Los últimos sondeos publicados el viernes daban una ligera ventaja a Syriza, la formación del ex primer ministro Tsipras, frente a la conservadora Nueva Democracia. Tanto él como Meimarakis se han comprometido a cumplir con los ajustes del exigente plan de rescate internacional.

Con los dos partidos lejos de la mayoría absoluta, Meimarakis ha retado durante toda la campaña a Tsipras a aceptar un gran gobierno de coalición, a lo cual se niega el interesado. En cuanto a la tercera posición, se decidirá entre los neonazis de Amanecer Dorado, el socialista Pasok, el centrista To Potami y los comunistas.

Publicidad

El exministro de Finanzas Euclides Tsakalotos subrayó las dificultades de formar una coalición, y afirmó que “las cosas están difíciles” en ese sentido. “Por un lado no podemos ir de nuevo a unas elecciones, y por otro no veo cómo podría trabajar Syriza con el Pasok o To Potami, y menos aún con Nueva Democracia”, dijo. (I)