El presidente de Colombia Juan Manuel Santos anunció este martes que luego del revés sufrido la víspera en la Organización de Estados Americanos (OEA), su gobierno acudirá a Naciones Unidas y a otros organismos internacionales para que escuchen las quejas de su país sobre los supuestos maltratos hacia miles de colombianos en la frontera con Venezuela luego que Caracas ordenó su expulsión.

"Seguiremos denunciando y reclamando por la dignidad y los derechos de los colombianos en cuantos escenarios sea posible", como ante el secretario general de Naciones Unidas, el Alto Comisionado de Derechos Humanos, la Organización Internacional de Migraciones y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, explicó el gobernante en una alocución televisada al país.

Santos enfatizó que su gobierno había solicitado una reunión de urgencia ante la Unasur (Unión de Naciones Sudamericanas) que, según él, nunca se dio, por lo que su gobierno decidió desistir de ella.

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El jefe de Estado aseguró que el fiscal colombiano Eduardo Montealegre le comunicó que "está considerando seriamente presentar una denuncia ante la Corte Penal Internacional contra miembros de la cúpula civil y militar del gobierno venezolano que podrían ser responsables por crímenes de lesa humanidad consagrados en el Estatuto de Roma".

En los últimos 13 días más de 1.000 colombianos han sido expulsados o deportados de Venezuela y se calcula que otros 10.000, que residían de forma irregular, han abandonado el país por miedo a represalias.

El secretario general de Unasur, el ex presidente colombiano Ernesto Samper, indicó en su cuenta de Twitter que el organismo internacional "propondrá en la Reunión de Cancilleres Comisión Regional de verificación y garantía de DDHH en frontera colombo-venezolana".

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UNASUR propondrá en la prox. Reunión d Cancilleres Comisión Regional de verificación y garantía d DDHH en frontera colombo-venezolana.

Maduro dice que éxodo colombiano generó una "emergencia humanitaria"
El presidente venezolano Nicolás Maduro, de visita en China, afirmó el lunes que en su país se generó una "emergencia humanitaria" producto del éxodo de colombianos, lo cual justificó su decisión de cerrar algunos pasos fronterizos y deportar a un millar de personas.

"Es cierto que hay una emergencia humanitaria por el éxodo humanitario masivo desde Colombia hacia Venezuela", afirmó Maduro en una edición especial desde China de su programa televisivo que transmite la televisora gubernamental.

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El mandatario explicó que "desde los 50, 60 y 70" comenzó la diáspora de colombianos que "huían de la violencia y el narcotráfico" y que a finales de los 90 y comienzos de la década pasada se agravó producto del paramilitarismo, hasta que la cifra llegó a 5'600.000 residentes colombianos en Venezuela.

El presidente venezolano insistió en que desea una "reunión cara a cara" con su homólogo colombiano para "resolver de raíz este tema".

Maduro sostiene que en el lucrativo contrabando en la zona limítrofe están implicados "paramilitares colombianos" que, aliados con la "derecha" local, buscan desestabilizar su gobierno.

La crisis se profundizó cuando ambos países llamaron a consultas a sus embajadores, el 27 de agosto. (I)

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