El cuidado del planeta fue el mensaje principal que dio este miércoles el papa Francisco a maestros y alumnos que se reunieron con él en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), como parte de su agenda de actividades en el país.

"Dios no quiere una creación para mirarse a sí mismo, todo lo contrario, la creación es un don para ser compartido", comentó el pontífice, interrumpido por lo menos en cinco ocasiones por los aplausos de los cientos de asistentes a la cita.

Sin embargo Francisco, quien dijo: "No cultiva quien no cuida y no cuida quien no cultiva", llamó a todos los sectores a trabajar en el cuidado del planeta. 

Publicidad

"No solo estamos llamados a ser parte de la obra creadora cultivándola (...) sino también estamos invitados a cuidarla, protegerla, custodiarla".

El papa cuestionó el daño que se ocasiona al medioambiente. "Daño que generamos a causa del uso irresponsable de los bienes que Dios ha puesto en la Tierra. Hemos crecido pensando que tan solo debíamos cultivar, que éramos sus propietarios".

Por eso el pontífice instó a trabajar en un cambio de actitud a nivel mundial. "No podemos seguir dándole la espalda a nuestra realidad, a nuestros hermanos, a nuestra madre la Tierra. No nos es lícito dar la espalda a lo que sucede a nuestro alrededor (...) No es humano entrar en el juego de la cultura del descarte".

Publicidad

Tal como ha hecho en otras ocasiones, el papa lamentó que en algunos medios de comunicación no sea noticia la muerte de un mendigo en las calles de Roma por el intenso frío del invierno, pero que sí se haga "escándalo mundial" cuando hay una caída en las bolsas de valores.

A los educadores pidió que se fomente el pensamiento libre y crítico de los alumnos. Para eso, aseguró, es importante que la mente y el corazón de los jóvenes 'salga de las aulas'.

Publicidad

"Son ustedes, queridos jóvenes, presente y futuro del Ecuador. Son los que tienen que hacer lío. Ustedes son semilla de transformación de esta sociedad", dijo Francisco. Los alumnos respondieron con aplausos.

"Esta tierra la hemos recibido como un don, un regalo. Qué bien nos haría preguntarnos: '¿cómo la queremos dejar?'", agregó el pontífice.

El papa Francisco se despidió con una bendición y rezó ante la imagen de la virgen Dolorosa, que estaba en el escenario junto a un crucifijo.

Mientras, los representantes de los maestros y de los estudiantes le entregaron presentes tales como una estatuilla del santo hermano Miguel, patrono de la educación ecuatoriana. (I)

Publicidad

"Jesús no buscaba doctorear, por el contrario, quiere llegar al corazón del hombre, a su vida, para que ésta dé fruto" Papa Francisco