La falta de estímulos en los hijos, en los empresarios, los conflictos en el hogar, la confusión de roles en la compañía y la casa y el vincular las emociones familiares en el negocio son algunas de las razones que impulsaron a la Cámara Ecuatoriano-Alemana a realizar la I Cumbre Internacional de Empresas Familiares en Ecuador.

El encuentro se desarrollará en Quito, Guayaquil y Cuenca el 22, 24 y 25 de este mes, respectivamente.

Johannes Ritz, director para América Latina de Courage Partners y exponente de la cumbre, comentó que la iniciativa alemana se dio porque en Ecuador las empresas todavía necesitan profesionalizarse.

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“Muchas de las empresas están en esa etapa crítica de la segunda y tercera generación, cuando las cosas se vuelven más complicadas y en muchos de los casos cierran”, manifestó Ritz, y resaltó que solo el 10% de las empresas familiares, a escala mundial, traspasa la tercera generación y es exitosa.

Según Ritz, en Ecuador más del 80% de las empresas tienen una estructura familiar al igual que en Alemania. Y aunque señaló que aquí ese traspaso generacional tiene problemas, cree que una de las causas es que no se mira como negocio de modo profesional, no se separa el tema emocional (contratar o despedir a familiares con los mismos parámetros que se realizarían a otros). Añadió que tampoco existe planificación y ese es el talón de Aquiles de muchos fundadores de empresas, pues implica preparar a otro para que haga lo que el inicial hizo durante toda su vida; “es dar un paso atrás en su liderazgo y eso emocionalmente no resulta fácil”.

En la cumbre también expondrán los alemanes Marc-Michael Bergfeld y Julis von Nordeck, el argentino Federico Leonhardt y el chileno Lionel Kaufmann. El costo es de $ 180 más IVA. (I)