La isla San Cristóbal (Galápagos) y las provincias de Santa Elena y Esmeraldas sintieron ayer la fuerza del oleaje y aguaje anunciado por el Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar), que continuarán hasta mañana. En Manabí, Guayas y El Oro no se reportaron mayores novedades.

El ECU-911 de Galápagos publicó ayer en su cuenta de Twitter imágenes del muelle de carga de San Cristóbal en donde se observaban grandes olas. Otros tuiteros colgaron en sus cuentas personales fotos donde se observan afectaciones en embarcaciones y el malecón.

En Santa Elena, la mesa 5 de Seguridad de la provincia, compuesta por entidades como la Gobernación, se reunió y tomó algunas resoluciones. Una de ellas fue el cierre del acceso al muelle del cantón Salinas, el cierre de la vía pública entre Ancón y La Diablica, además del tramo Puerto Aguaje y Mar Bravo, de 12:30 a 17:00.

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En la playa de Mar Bravo las olas aumentaron entre las 03:00 y las 04:00, por lo que la vía amaneció con piedras, troncos y otros materiales. Además, en el sector La Diablica, fragmentos del enrocado, que protege la zona, sufrió daños leves. En el cantón La Libertad se dispuso el retiro de bañistas y cierre provisional de las playas.

En cambio, se colocaron banderas rojas en las playas de Atacames y Tonsupa desde las 14:00 de ayer, cuando fuertes olas empezaron a llegar a las costas de Esmeraldas. En Súa, las olas golpearon con violencia contra el malecón de este balneario donde personal de la Secretaría de Gestión de Riesgos se encontraba vigilante del comportamiento del mar.

Pese al fuerte oleaje, decenas de bañistas disfrutaban en el mar. El oleaje fue más fuerte en San Francisco del Cabo, cantón Muisne, donde una familia fue afectada. (I)