Bombero narra vano intento para rescatar a su jefe

Vistosos arreglos florales con mensajes enviados desde otros cantones llegaron ayer al velatorio de Ismael Ortiz, el jefe del Cuerpo de Bomberos de Paute, quien falleció cuando trataba de localizar en el río Paute a una adulta mayor de 86 años que habría sido arrastrada el pasado martes 21 por la crecida del río Yanuncay, en Cuenca.

A un lado del féretro, en el auditorio del Municipio de Paute, Mariuxi Ordóñez, la viuda, recibió continuas muestras de apoyo. Ortiz dejó huérfanos a dos niños, de 1 y 5 años.

Mientras en el edificio del Cuerpo de Bomberos de este cantón, Miguel Benavides, bombero desde hace siete años, contuvo las lágrimas cuando narró que el pasado martes, a las 09:00 su jefe (Ortiz) ordenó el inicio de la búsqueda de la adulta mayor, recorriendo desde el sector Malima hasta un embalse en Guachapala.

“Teníamos todo el equipo y en los diez primeros minutos no hubo novedades, hasta que llegamos al puente de Chicti, en donde el cauce empieza a encajonarse, se hace más angosto pero más caudaloso, pasamos la primera caída. Al llegar a la segunda un golpe de agua en una piedra provocó una especie de ola, el bote se inclinó como 90 grados y los tres tripulantes caímos, lamentablemente el jefe no pudo salir del agua”, evocó.

Los remos, las cuerdas, equipos de comunicación, casco y chaleco se perdieron en el caudaloso río. Narró que luego caminó por la irregular y por momentos empinada geografía hasta llegar a la carretera, pero ningún chofer paró cuando pidió ayuda.

Mientras, Édison Curillo, el otro bombero que los acompañó, corría por la orilla del río para intentar ayudar a su jefe, pero no pudo continuar por lo agreste del sitio, que se convierte en una especie de codo, donde choca el agua. Subió parte de la montaña para cruzar. Allí encontró sin vida a Benavides.

Hasta las 15:00 de hoy es el velatorio de Ortiz. Se cremará el cuerpo en una ceremonia solo con la familia. (I)

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de desaparecida tiene la mujer de 86 años que habría sido arrastrada por la crecida del río Yanuncay, en Azuay.