La audiencia de juzgamiento en contra de la exdirectora del hospital Francisco de Ycaza Bustamante y el exjefe de Neonatología, por la muerte de los once neonatos que fallecieron entre febrero y marzo del 2011, se suspendió ayer.

La diligencia no se pudo concretar por la falta de testigos de la defensa de los implicados por homicidio culposo y por no tener una parte de la documentación del proceso que no habría sido entregada a la defensa para la cita judicial.

La decisión la tomaron los jueces del Tribunal Undécimo de Garantías Penales, presidido por Javier Sandoval.

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Stalin Ramos, abogado de cuatro de los bebés fallecidos, expresó su malestar por el aplazamiento de la audiencia.

Afirmó que hasta cierto punto el Tribunal tiene razón para evitar que la defensa alegue que está en indefensión, pero para la acusación particular se trataría de una estrategia para dilatar el proceso.

Tanto Ramos como Norma Torres, madre de uno de los infantes fallecidos (Dylan Samaniego), esperan que se agilite este proceso, que lleva más de cuatro años. Temen que se cumplan los cinco años –en el 2016– y prescriba la causa.

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Édgar Salazar, abogado defensor de uno de los implicados, sostuvo que la documentación (27 cuerpos con cerca de 4.000 páginas) la pidieron en varias fechas y no las tiene el Tribunal, la Fiscalía, ni ellos.

Margarita Neira, fiscal que lleva el caso, indicó que la audiencia fue convocada el 30 de marzo y que la defensa pudo traer a los testigos.

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Los acusados hubieran sido declarados inocentes por el Tribunal Décimo de Garantías Penales en noviembre del 2013. La Sala Penal del Guayas aceptó –en noviembre del 2014– el recurso de nulidad que la Fiscalía interpuso por este caso.

La Primera Sala declaró la nulidad de la sentencia el 21 de noviembre del 2014, luego de comprobar que uno de los jueces del Tribunal habría mantenido relación laboral con el abogado de un implicado. (I)