Monseñor Antonio Arregui, arzobispo de Guayaquil, fue el primero en expresar su júbilo por la inclusión de Guayaquil en la ruta del papa Francisco en Ecuador. Estuvo a las 07:00 en la rueda de prensa que las autoridades de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana ofrecieron ayer en Quito junto al presidente Rafael Correa.

Y cuatro horas más tarde ya estaba en la Unidad Educativa Javier de Guayaquil, ubicada en el km 5,5 de la vía a la costa, con los líderes de la comunidad jesuita, a la que pertenece el pontífice, para hablar sobre los preparativos de bienvenida.

Ese plantel justamente aparece como una de las opciones para que Francisco lo visite, pues él ha manifestado su deseo de encontrarse con el padre Francisco Cortés, conocido como Paquito, su amigo personal, y quien lo recibió cuando el Pontífice llegó a la ciudad en la década de los ochenta, época en la que era superior de los jesuitas argentinos.

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Según un religioso que pidió la reserva, otro posible sitio que visite el papa Francisco sería el santuario de la Divina Misericordia, en el km 26 de la vía a la costa. Mientras fieles consultados por este Diario, sobre todo en el norte de la ciudad, señalan que sería ideal que se realice una misa campal en el parque Samanes o en la av. Paseo del Parque, adjunta. Esta última locación está a un costado de uno de los lugares en los que estuvo en 1985 el papa Juan Pablo II.

“Que sea en el Parque Samanes, sería el lugar idóneo y mucho mejor. Es amplio para que llegue la gente. De ley va a haber harta gente”, afirmó Karina Chang, 46 años, de Samanes 5 y quien fue testigo de la primera visita del papa a Guayaquil.

No obstante, uno de los portavoces oficiales de la visita papal, padre César Piechestein, se muestra cauto y manifiesta que el itinerario aún está en estudio y que no se debe elucubrar sobre el tema. El religioso indica que el Vaticano definirá la agenda del vicario de Cristo.

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Y sobre aquello el presidente de la República, Rafael Correa, refirió ayer que en los próximos días vendrá una segunda comisión del Vaticano para recorrer las posibles locaciones que recorrerá el papa en su visita de tres días, del 6 al 8 de julio.

El equipo de avanzada de la Santa Sede ya estuvo en el país durante el mes pasado.

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Mientras, para el padre Gilberto Freire, superior provincial de los jesuitas en Ecuador, que el papa visite el colegio Javier sería deferencia especial.

“De esta manera estaríamos como estrechando aún más los lazos que siempre han existido con el santo padre y su vinculación con la compañía de Jesús, con nuestras obras”, expresa el clérigo.

El padre jesuita Fabricio Alaña, rector del Javier, sostiene que la llegada del pontífice es una bendición que debe servir para que los católicos fortalezcan su fe en Dios.

“Es sentir la presencia de Dios, el mensaje de la iglesia en los tiempos actuales, un mensaje de esperanza”, enfatiza.

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El padre Piechestein recalca que la visita del papa no debe quedar solo en la algarabía de recibirlo, sino que lleve a los católicos a comprometerse con Dios. “Tenemos que procurar llevar a la práctica el mensaje de Cristo”. (I)

Detalles
Itinerario

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Durante la rueda de prensa que se ofreció ayer en la Conferencia Episcopal, en Quito, el presidente de la República, Rafael Correa, indicó que el itinerario definitivo de la visita papal se difundiría a mediados del próximo mes.