Los desahucios siguen creciendo en España

Lejos de remitir, el número de ejecuciones hipotecarias (paso previo al desahucio de la vivienda) en España continúa creciendo aunque a un ritmo menor.

En 2014, se produjo un incremento del 7,4 por ciento, que afectó a un total de 34.680 hogares. Los datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) no distinguen nacionalidades pero el repaso de las últimas estadísticas del servicio de asesoría hipotecaria que presta la Embajada de Ecuador permite confirmar esa tendencia.

La iniciativa que arrancó en 2012 en Madrid, Murcia, Valencia y Barcelona se dedicaba a brindar solo información sobre los entresijos de los procedimientos que conllevan el desalojo de la vivienda. En la actualidad, un staff de 35 abogados presta atención y efectúa acompañamientos de los casos en 17 ciudades españolas. En breve serán 21 localidades.

Entre enero y diciembre de 2013 se prestaron 5.858 asistencias. Un año después, la cifra ascendió a 14.786. Solo en 2014, el Gobierno destinó un millón de dólares para financiar este servicio.

Pero, ¿a cuántas familias ecuatorianas afecta el problema de impago de hipotecas? Al momento, la legación diplomática tiene identificados seis mil expedientes.

“En cuatro o cinco meses tendremos un cálculo más preciso porque una familia siempre requiere más de dos asistencias así que estimamos que rebasarán los 12.000”, asegura el embajador Miguel Calahorrano. Solo en enero pasado, los letrados gestionaron 1.491 consultas presenciales, 253 acompañamientos y reunieron a 479 personas en sesiones de asesoría colectiva.

Desde que arrancó el proceso de acompañamiento en junio de 2013, la legación diplomática ha conseguido 464 daciones en pago (entregar la vivienda a cambio de saldar la deuda), 212 alquileres sociales, 85 condonaciones de deuda, 74 reestructuraciones, 15 rebajas de las cuantías adeudadas y 12 moratorias de desahucio.

El diplomático está convencido de que la dación en pago no es la mejor solución aunque conseguirla ha sido un gran alivio. “El hecho de que hayan regresado al país en torno a 40.000 ecuatorianos nos hace pensar que no existe una tendencia al retorno.

Con la dación en pago la familia se queda sin una casa donde vivir, por eso nos interesa más lograr alquileres sociales, rebajas en las deudas o condonaciones”, señala. Para conseguirlo ha mantenido reuniones con directivos de ocho entidades bancarias. De momento, la Caixa ha accedido a revaluar los precios de las viviendas para bajar el valor de las cuotas.

La estrategia incluye una acción adicional: presentar este semestre una demanda colectiva, a través de asociaciones de inmigrantes, ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. “El objetivo es acabar con determinadas cláusulas abusivas que aún no han sido puestas en cuestión”, concluye.