Un hombre se salvó de morir cuando un grupo de individuos se le acercó y uno de ellos disparó a quemarropa. El hecho ocurrió el pasado martes a las 21:00, aproximadamente, en la cooperativa Nueva Prosperina, en el norte de Guayaquil.

La víctima, cuya identidad se mantiene en reserva por seguridad, contó que estaba estacionado en su moto, junto con su novia, cuando sintió un impacto de bala a la altura del corazón.

Relató que uno de los sujetos, a quien sí identificó, le gritó: “Viste cómo pagas”, y enseguida le disparó al cuerpo. Creyendo que lo habían matado, los sujetos, quienes habían llegado en una camioneta y en una motocicleta, huyeron del lugar.

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En el suelo, la víctima se percató de que la bala solo le rozó el lado izquierdo del tórax. De inmediato llamó a la Policía y se desarrolló un operativo.

“No quiero tener problemas con nadie, solo quiero que las autoridades hagan justicia. Estoy vivo de milagro y agradecido con Dios por esta nueva oportunidad”, indicó el herido, quien acudió hasta la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía, en el Cuartel Modelo de la Policía, para presentar la denuncia.

Un parte policial detalla que durante el operativo de búsqueda, la camioneta, la moto y sus ocupantes fueron localizados en la avenida Casuarina, conocida como la entrada de la 8.

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Allí fueron retenidos para investigaciones los hermanos Alberto, Ángel y Tony A. C., Luis I. B., Jonathan O. M., Vicente M. A., Frank G. G., Joel T. C., Luis B. G. y Carlos S. M.

Los diez fueron trasladados hasta la Unidad de Flagrancia, donde el fiscal Walter Suárez dispuso la aprehensión solo de Tony A. C., la retención de los dos vehículos y el ingreso a las bodegas de la Policía Judicial del revólver calibre 38 que se decomisó en el operativo.

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Mientras se realizaba la diligencia, Suárez ordenó que se hiciera el reconocimiento médico al herido.

El afectado, quien caminaba apoyado en su novia, indicó conocer las causas del atentado que sufrió. Pero aclaró que por temor a represalias únicamente lo comentó con las autoridades judiciales.

El Código Orgánico Integral Penal, en el artículo 143, castiga el delito de sicariato con una pena privativa de libertad de hasta 26 años. No obstante, la tentativa de una infracción, según el artículo 39, es castigada con uno a dos tercios de la pena mencionada.(I)