Preocupación e incertidumbre mantienen los moradores de la urbanización Bosques de Castilla, que está ubicada en el km 1,5, al final de la calle entre los centros comerciales Riocentro y Village Plaza.

Esto se debe al constante peligro que sufren al salir de sus residencias, pues al hecho de que la avenida es doble vía y no hay semáforo, se une el que la urbanización está en una curva y que los vehículos que transitan en ambos sentidos no miden la velocidad ni ceden el paso a los carros que se acumulan en el ingreso y salida de la urbanización.

“Esta situación es alarmante, antes no era así porque no había tanta expansión comercial, pero ahora es un problema de todos los días y ni se diga el fin de semana, cuando unos buses grandotes se estacionan al pie de la ciudadela con gente que viene al Parque Histórico de Guayaquil, uno como residente no tiene por dónde salir”, se queja Andrea, quien prefiere no dar su apellido. Ella reside en Bosques de Castilla desde hace 15 años aproximadamente.

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A unos 30 metros del ingreso principal a la urbanización, un letrero pide: ‘Precaución, entrada y salida de vehículos’. Del otro lado de la vía, otra señalización dice velocidad máxima de 40 km/h.

Jaime Buendía, administrador de Bosques de Castilla, señala que entre las 06:30 y 07:00, y de 16:30 a 19:00 es cuando más tráfico se acumula, y detalló que hace dos años la administración de ese entonces envió una carta a la Comisión de Tránsito del Ecuador sin obtener respuesta. “Enviaré otra carta formal solicitando más control”, manifiesta.

Mientras, Andrea cree que se puede disminuir el problema con rompevelocidades en la vía. “Esto al menos obligará a los vehículos a ir despacio”, enfatiza. (I)