La Corporación del Seguro de Depósitos (Cosede) inició la mañana de ayer, en Quito, la devolución de los dineros de quienes fueron clientes de la desaparecida cooperativa de ahorro y crédito Ejército Nacional, de acuerdo con un cronograma establecido.

Ayer, a partir de las 08:00, asistieron aquellos depositantes cuyos dígitos finales de la cédula de ciudadanía son 1 y 2. El proceso finalizará el 3 de marzo próximo, con las personas que tienen dígitos 9 y 0.

La cooperativa Ejército Nacional entró en liquidación el 5 de enero pasado. El cierre afecta a unos diez mil socios.

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Su presidente, el coronel (r) J.D., tendría 80 días de prisión preventiva, expresó la tarde de ayer Juan Cevallos, uno de los afectados, quien señaló que demandó al funcionario.

Cevallos le siguió a J.D. un juicio “por presunta estafa de unos terrenos que ofrecía”, aseguró y agregó que aportó con el afán de adquirir un bien en el sector de Pomasqui.

La Cosede, por disposición legal, cubrirá hasta mil dólares y quienes tengan sobre esos valores “deberán reclamar la diferencia al liquidador, dentro del proceso de liquidación de la entidad”. Eso informaba uno de los comunicados adheridos en la puerta principal de ingreso de lo que fue la cooperativa, ubicada en el sector de La Recoleta, salida sur del centro histórico, frente al Ministerio de Defensa.

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Quienes tengan más de esos mil dólares deberán esperar nuevos cronogramas de pago que se desconoce cuándo se establecerían, testimoniaron los afectados, que desde las 08:00 de ayer estuvieron en fila para recibir sus acreencias.

Cevallos señaló que el liquidador, nombrado por la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, supuestamente no tiene conocimiento de unos presuntos descuentos que la cooperativa Ejército Nacional supuestamente realizaba a los socios, militares activos y pasivos, para comprar unos terrenos en Pomasqui y en Guano (Chimborazo), por ejemplo, para entregar a los cuentahabientes de ese entonces.

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Él es uno de los 543 socios presuntamente perjudicados por esos terrenos, cuyo costo era de 7.500 dólares cada uno (200 metros cuadrados). ¿Qué pasa con ese dinero? Se pregunto. Espera que le devuelvan los 15.150 dólares que aportó como militar en servicio pasivo.

Este Diario intentó comunicarse con la Corporación del Seguro para obtener una versión, pero los teléfonos fijos solo timbraban hasta conectar una grabadora de voz que indicaba los horarios de atención.

Rogelio Abarca, por 30 años socio de la cooperativa, tampoco tenía claro qué sería de sus fondos que aportó como servicio mortuorio en ese tiempo. Solo están devolviendo el ahorro especial (acumulado) y el normal (de uso libre). “ No sé qué pasará con mis $ 10 mil”.

En tanto, Víctor Amán expresó que en las primera horas se mostró preocupado, perdió esa expresión cuando salió de la entidad con la totalidad de sus fondos. Él tenía dos libretas (especial y normal) de ahorros que sumaban 500 dólares y como la Cosede estaba devolviendo mil, recuperó su dinero. (I)

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10
Mil
es el número de socios de la cooperativa Ejército Nacional que cerró sus puertas desde enero pasado.

1.000
Dólares
es el monto máximo de entrega de fondos a los socios por parte de la Cosede.