Franklin Morán, delegado del Municipio para el control del área regenerada, manifestó ayer que el proceso que interpuso en contra de la comerciante Sonia Cañizares, por supuesta falta a la honra, fue como persona natural debido a que no pudo notificar el hecho al procurador municipal.

Cañizares fue privada de su libertad luego de un incidente con Morán hace una semana. La jueza que llevó el caso fijó 15 días de detención por transgredir el art. 396 numeral 1, que estipula esa pena “a la persona que por cualquier medio profiriera expresiones en descrédito o deshonra en contra de otra”.

El Municipio descartó su responsabilidad en el hecho y refirió que la acción instaurada fue a título personal del funcionario. Esto, pese a que el lío se registró en un horario laboral.

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Morán acotó que recibió insultos de la comerciante después de manifestarle que no podía vender agua en la zona de la Terminal Terrestre.

Pero, el cónyuge de Cañizares, Vicente Correa, aseguró que ella fue “provocada” por el delegado municipal.

Cañizares es hija de María Quiña, quien fue supuestamente agredida, en enero pasado, por dos policías metropolitanos. Por este caso se ventila un proceso por aparente delito de odio en la Fiscalía. (I)