Con un informe de once páginas sobre la crisis del hospital del IESS Teodoro Maldonado Carbo, en Guayaquil, Iván Espinel, exdirector provincial de la institución, aseguró que aunque no le correspondía legalmente, advirtió con anticipación la “situación caótica” que enfrentaba la casa de salud.

“Nosotros hacemos un informe con fecha 18 de septiembre al economista (Víctor Hugo) Villacrés (presidente del directorio del IESS), en el que en once páginas le exponemos todas las partes implicadas y le hacemos las recomendaciones de la situación del hospital”, afirma Espinel mostrando los documentos dirigidos a Villacrés.

En ellos se detalla la situación de los medicamentos debido a que “no existen programaciones definidas de fármacos” y a que los pedidos de medicinas e insumos “no constan en la planificación anual de compras”.

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“Al cierre de este informe, esto es en septiembre 12/2014, existen 344 ítems de medicamentos en saldos cero y 228 ítems con saldos mínimos (1-1.000 cantidades), a lo que se concluye la recurrencia a corto plazo de falta de medicamentos”, advierte Espinel.

Entre las anomalías que menciona en el documento consta que el hospital certificó tener los recursos para 17 compras con la misma descripción, por un valor de $ 484.460, de las cuales se dispusieron órdenes de trabajo para siete proveedores con certificaciones duplicadas, las que luego se anularon.

En una entrevista concedida a este Diario el jueves pasado, el presidente del directorio del IESS, Víctor Hugo Villacrés, expuso que “más que manejo político, hay ineficiencia administrativa e incapacidad” en el hospital del IESS en la ciudad.

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De ahí que, indicó, en diciembre pasado se removió a varios funcionarios, entre ellos a Espinel y al entonces gerente del hospital, Marlon Manya.

Villacrés también señaló que las bodegas de la farmacia del hospital estaban abastecidas en el 90%, pero que los pacientes no recibían las medicinas, porque éstas no aparecían en las computadoras de los médicos.

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Sin permiso sanitario
Hasta diciembre pasado, el hospital del IESS no contaba con el permiso de funcionamiento sanitario que otorga el Ministerio de Salud Pública a todo local de atención pública.

Espinel mostró varios documentos en los que desde agosto le insistió al director del hospital, Juan Carlos Gilbert, que le informe el avance del trámite.

“A pesar de que era un hospital que manejaba independencia y solo informaba a Quito, nosotros indagamos y le pedimos una explicación (...), nos decía que tenía que hacer una consultoría por el sistema contraincendio, pues tampoco tiene el permiso del Cuerpo de Bomberos”, indicó Espinel.

También constan en el documento de Espinel varias observaciones relacionadas con la contratación de personal en el hospital y que no cumple los requisitos del perfil del cargo.

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En una carta al director general del IESS, José Martínez Dobronsky, en octubre pasado, Espinel menciona el desabastecimiento de las medicinas y pide autorización para “iniciar conversaciones con farmacias privadas para que estas, después de un proceso de calificación, sean prestadoras del servicio al IESS”, plan que la semana pasada anunció Villacrés.(I)

(Le pondría el brazalete) rojo, de emergencia total. La situación era caótica dentro del hospital, por eso dispusimos ese informe (...), es conocido que se notificó”.Iván Espinel, exdirector del IESS