En la oreja vial que conecta la Perimetral con la av. Francisco de Orellana, la treintena de árboles añosos que fueron sacados hace tres años de la av. de las Américas y trasplantados allí llenan de verdor ese espacio vial. Se enraizaron al poco tiempo y sobrevivieron.

Solo un 5 % de los árboles murieron, afirma Abel Pesantes, director de Áreas Verdes del Municipio.

El funcionario sostiene que cada año son trasplantados unos 80 árboles al estar en pendientes, en zonas que representan riesgo para la comunidad. “Hay unos (árboles) que no causan daño, pero si son sembrados superficialmente, con un fuerte viento y la erosión del suelo se pueden virar”, dice.

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Los lugares en donde se vuelven a sembrar estos árboles son en el relleno sanitario Las Iguanas y el distribuidor de tráfico que conecta la Perimetral con la Francisco de Orellana y la vía a Daule.

Guayaquil tiene 2.700 áreas verdes, lo que equivale a 8.63 m² de estos espacios por cada habitante. Según la Organización Mundial de la Salud, la cifra debe ser de 9,2 m². (I)