Se abre indagación por muertes en Coca Codo

LAGO AGRIO-MONTALVO

El fiscal general, Galo Chiriboga, anunció ayer que empezará una investigación penal para determinar presuntas responsabilidades en el accidente ocurrido el pasado sábado en el proyecto hidroeléctrico Coca Codo Sinclair, donde 13 obreros murieron y otros 12 quedaron heridos.

Agregó que se busca determinar si se respetaron los protocolos y analizar si los materiales usados eran los adecuados. Lo dijo en la inauguración del Centro de Investigación de Ciencias Forenses en Lago Agrio, Sucumbíos.

La tarde de ayer tenía previsto reunirse con los fiscales que abrieron la investigación de oficio para definir si el caso se queda en la Fiscalía de Sucumbíos o pasa a la provincia de Napo.

“Tenemos que analizar científicamente, una razón que nos explique la muerte de estas 13 personas. (...) Es el compromiso que asume la Fiscalía, decirle al país que pasó”, dijo Chiriboga.

En tanto, José Miguel Vique, Eduardo Gómez y Joselo Gaibor, quienes resultaron heridos y llegaron a hospitales de Lago Agrio, recibieron el alta médica el pasado martes.

Sobre supuestas quejas por las condiciones de trabajo en la obra, el ministro coordinador de Sectores Estratégicos, Rafael Poveda, en una entrevista con radio Platinum de Quito, el martes, aseguró que los trabajadores cuentan con todos los beneficios de ley y que todo está regulado por el contrato colectivo al que pertenecen.

Mientras, en el cantón Montalvo, en Los Ríos, familiares de dos de los fallecidos entre lágrimas piden que se aclaren los hechos por la muerte de los jóvenes Darwin Pedro Hidalgo Morales y Cristian García Alarcón, oriundos de esa localidad.

Hidalgo, de 26 años, deja en la orfandad a dos hijos de 3 y 8 años. Su hermana, Esther Hidalgo, dijo que tenía dos años y medio laborando en la compañía. “Estamos muy golpeados por la muerte repentina de Darwin, le tocó partir, ahora necesitamos resignación”, indicó.

Vilma Hidalgo, otra hermana, dijo que han recibido llamadas de funcionarios del Gobierno para decirles que realizarán investigaciones y que les ayudarán con un abogado para los trámites del seguro de vida.

En tanto, el cuerpo de Cristian García Alarcón, de 20 años, fue sepultado el pasado martes. El joven residía con su madre, Flor Alarcón, quien sostuvo que este llevaba solo tres meses en la empresa y que el día del accidente recién se enteró que trabajaba allí.

Añadió que cuando salió de Montalvo dijo que quería arreglar la casa y reunir dinero para cumplir su sueño, ser militar. “No pensé que mi hijo trabajaba en esas profundidades, sino no le dejaba ir”, señaló. Desconsolada pidió justicia. (I)

Obviamente no hay una intención dolosa para producir un accidente de esta naturaleza, pero el país tiene que saber por qué se produjo ese percance”.Galo Chiriboga, fiscal general