Las autoridades de Pakistán decidieron suspender temporalmente la campaña contra la polio ayer, tras el asesinato de cuatro vacunadores.

La matanza tuvo lugar en un suburbio de Quetta, capital de la provincia de Baluchistán, y fue cometida por hombres armados que se desplazaban en moto y atacaron a siete vacunadores, señaló Akbar Durrani, ministro provincial del Interior.

Un hombre y tres mujeres murieron, y tres mujeres resultaron heridas. Con estas cuatro víctimas, el balance de los trabajadores antipolio asesinados en Pakistán en los últimos dos años es de 65. Pakistán ha concentrado el 85% de los casos de polio del mundo en el 2014.

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La campaña contra los vacunadores es obra principalmente de los talibanes y de los imanes, que nutren la ola de rumores sobre la vacuna.

Algunos sostienen que causa esterilidad y que la promueve occidente con el objetivo de reducir la población del país.