El gobierno federal dio pasos el miércoles para reducir los niveles de smog vinculados con asma, enfermedades pulmonares y otros problemas de salud, cumpliendo una promesa de campaña del presidente Barack Obama y dejando listo el escenario para una nueva confrontación con los republicanos y la industria de energía.

En un esperado anuncio, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) dijo que prefiere un nuevo límite más bajo de contaminación de ozono de entre 65 y 70 partes por millón, pero dejó abiertas las puertas a la posibilidad de implementar el nivel de 60 partes por millón pedido por grupos ambientalistas. La norma actual es de 75 partes por millón, puesta en vigor por el gobierno del presidente George W. Bush en el 2008.

Cumplir con las nuevas reglas costará a la industria unos 3.900 millones de dólares en el 2025 si el gobierno decide fijar el límite en 70 partes por millón, dijo la agencia. A un nivel de 65 partes por millón, agregó, el costo aumenta a 15.000 millones.

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Pero grupos de la industria dicen que el costo sería mucho mayor y el límite casi imposible de implementar para refinerías y otras empresas.

La administradora de la EPA, Gina McCarthy, rechazó esas afirmaciones y dijo que límites más bajos de emisiones estimularían más negocios, inversiones y empleos al hacer más saludables las comunidades. Dijo que los estados tendrían tiempo para diseñar cuidadosamente planes para cumplir con las nuevas normas en las próximas décadas.

"Hemos tenido mucha mejoría en la calidad del aire en general. La cantidad de elevación que va a requerirse es ciertamente menor" que las normas previas de ozono, dijo McCarthy. "Lo hemos hecho antes, y lo haremos de nuevo".

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Grupos empresariales como la Asociación Nacional Manufacturera dijeron que la decisión del gobierno es un obstáculo que amenaza con poner en peligro la recuperación del sector en Estados Unidos. Acusaron al gobierno de cambiar los objetivos, porque estados siguen trabajando para implementar las normas del 2008.

El senador republicano James Inhofe, que va a asumir la jefatura de la comisión de Obras Públicas y el Ambiente en el Senado en enero, prometió "una supervisión vigorosa" de la propuesta.