La incorporación de las amas de casa al sistema de seguridad social genera algunas preocupaciones, pese a que la propuesta todavía no es discutida en la Asamblea.

El proyecto de reforma a la Ley de Seguridad, que el Ejecutivo remitió al Legislativo junto a cambios al Código del Trabajo, agrega entre los beneficiarios a quienes “realicen trabajo no remunerado del hogar”.

El documento, que hasta ayer no era conocido por la comisión pertinente, especifica que se garantizará la pensión de estas personas por concepto de vejez, muerte e invalidez.

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Zobeida Aragundi, integrante de la Coordinadora Política de Mujeres filial Guayaquil, afirma que la cobertura será parcial porque no se incluyen los servicios de salud que presta el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

“Esto ni siquiera es una dádiva, es un saludo a la bandera”, cuestiona la activista.

Además, objeta una de las fuentes de financiamiento anunciadas por las autoridades de Gobierno: el excedente al tope de las utilidades.

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El ministro de Relaciones Laborales, Carlos Marx Carrasco, confirmó ayer que ese dinero “se requiere para el tema de las amas de casa”, declaró en entrevista con Gamatv.

Lo dijo al defender la reforma al Código del Trabajo que limita la distribución de las utilidades para los empleados.

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La propuesta indica que “no podrán exceder de veinticuatro salarios básicos unificados”; caso contrario, “será entregado (el excedente de utilidades) al régimen de prestaciones solidarias de la seguridad social”.

El financiamiento también preocupa a Rubén Barberán, expresidente del Consejo Directivo del IESS, y a Roberto Villacreses, investigador asociado del Instituto Ecuatoriano de Economía Política.

Barberán sostiene que el IESS no está en la “capacidad financiera” de asumir a nuevos afiliados.

El presidente Rafael Correa habló de 1’500.000 beneficiarios, cuando el pasado sábado anunció las reformas en una concentración en Guayaquil.

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Barberán sugiere realizar un estudio actuarial para definir cómo la medida incidiría en la institución.

Correa informó el sábado que la afiliación se financiará con un subsidio del Estado y un “aporte de la madre”.

La propuesta menciona que el subsidio se calculará “en función de la situación socioeconómica de la unidad económica familiar”, y el aporte, en base a los ingresos de dicha unidad.

Villacreses estima que la mayoría de hogares sí podrán asumir esto último, pero se pregunta cómo el Estado financiará el subsidio y cuántos costos tendría que incurrir el IESS para atender la demanda.

“La medida suena bien, pero es bastante demagógica”, dice.

Contenido
REFORMAS

Alcance
El proyecto de reformas a la Ley de Seguridad Social plantea cambios a 11 artículos; en algunos casos se agregan incisos y en otros se sugiere reemplazar textos del articulado.

Nuevo título
Además se propone añadir un nuevo título de nombre “El régimen de pensiones del trabajo no remunerado del hogar”, que tiene 17 artículos no innumerados y varios incisos.