El presidente de Rusia, Vladimir Putin, afirmó que la economía del país está preparada para hacer frente a una nueva ola de la crisis e incluso a una "caída catastrófica" de los precios de los hidrocarburos, en una entrevista publicada hoy por la agencia oficial Tass.

"Sí, (la economía) está preparada. Tenemos en cuenta todos los escenarios, incluida la llamada caída catastrófica de los precios de los hidrocarburos, que es perfectamente posible", respondió Putin sobre el grado de preparación de la economía rusa ante una nueva crisis.

El jefe del Kremlin, que participará en la cumbre del G20 que comienza mañana en Australia, destacó que en tiempos de crisis se acentúan los desequilibrios económicos globales, lo que inciden negativamente en la economías emergentes, pero destacó que las reservas con que cuenta Rusia la dejan en mejor pie que a otros países.

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"Somos muy cuidadosos con nuestras reservas, con las de divisas y con las del Gobierno. Son bastante grandes, lo que nos permite estar completamente seguros de que cumpliremos nuestros compromisos en el ámbito social y mantendremos los procesos presupuestarios en los marcos previstos", dijo.

Putin indicó que ya mucho antes de la actual caída de los precios del petróleo las autoridades comenzaron a debatir la posibilidad de emplear los recursos acumulados en el Fondo de Bienestar Nacional en proyectos de infraestructuras clave.

"Ya lo planeábamos, y ahora cuando las condiciones de la coyuntura han empeorado vamos a hacerlo", manifestó.

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Sin embargo, el presidente ruso recalcó que ello no significa que "las reservas se vayan a quemar de manera insensata, sin un efecto económico adecuado, sólo para resolver problemas corrientes".

La caída de los precios del petróleo por debajo de los 80 dólares el barril ha supuesto un duro golpe para la economía rusa, altamente dependiente de los ingresos que generan las exportaciones de crudo.