Autoridades de la Función Judicial y del Gobierno exhortaron ayer a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a “rectificar procedimientos” para tratar denuncias en contra del Estado ecuatoriano; esto a propósito de las audiencias celebradas el lunes pasado, en Washington, en las que sectores sociales y juristas se quejaron de supuestos perjuicios a los derechos humanos de los pueblos indígenas y la presunta falta de independencia de la justicia.

El presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), Gustavo Jalkh, rechazó la forma de actuar de la CIDH que, a su juicio, “se hace daño y le hace daño al Sistema Interamericano” cuando analiza procesos de nuestro país, muchos de los cuales no han sido resueltos.

Esto constituye “una falta de respeto a los jueces”, dijo Jalkh, al pedir a los denunciantes que prueben sus acusaciones y planteen una acción administrativa que permita evaluar la falta de independencia. “El Sistema Interamericano debería recuperar sus principios y aportar con la independencia judicial, diciéndoles a ciertos actores políticos que no presionen a la Función Judicial”.

Publicidad

Mientras, la ministra de Justicia, Ledy Zúñiga, informó que Ecuador envió un informe a la Comisión en el que se ratifica la independencia de los jueces. “No tiene sentido que vayamos como representantes del Estado a un lugar donde los análisis que se hacen son parcializados y subjetivos (...). La CIDH es una sede de la oposición política en el Ecuador y de otros gobiernos progresistas”, dijo.

Durante la audiencia, el delegado del gremio de abogados, Juan Vizueta, solicitó a la CIDH enviar una comisión al Ecuador para que preparen un informe sobre el grado de supuesta interferencia del Ejecutivo en el poder judicial.