Tras casi una hora de secuestro, la Policía Judicial rescató la noche del viernes a dos víctimas de un secuestro exprés, y trasladó a los presuntos plagiadores a los calabozos de la Policía Nacional.

La odisea empezó a las 19:45, cuando una pareja que paseaban por el Malecón del Salado solicitó un taxi para ir a un restaurante en Urdesa central. Según los afectados, el taxista condujo por la avenida Carlos Julio Arrosemena y luego tomó una calle desconocida hacia Urdesa, pero a la altura del Club de Leones fueron interceptados por un auto del que descendieron dos personas armadas.

"Sentí cuando golpearon los vidrios del carro, el taxista les abrió y se subieron con armas de fuego", dijo la afectada. Agregó que los desconocidos los registraron, les arrebataron los teléfonos, tarjetas de crédito y débito, y pidieron las claves para retirar el dinero de los cajeros electrónicos. Además, indicó que les tomaron fotos y amenazaron con asesinarlos si los denunciaban con la Policía. 

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Personal de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) los ubicó a las 20:30 en la vía Perimetral. Los agentes bloquearon el vehículo, colocaron a los sospechosos boca abajo en el parterre central de la vía, y les encontraron un revólver calibre 38. A las víctimas fueron liberadas y llevadas a un patrullero.

El teniente coronel William Martínez, jefe de la Dinased zona 8, dijo que el taxista habría actuado en complicidad, y que el otro detenido presenta seis detenciones por robo. "Estábamos haciendo investigaciones en el norte de la ciudad, buscábamos al taxi que era utilizado para realizar secuestros express. Horas después lo encontramos en la Perimetral", dijo la autoridad policial.