El primer ministro canadiense, Stephen Harper, condenó ayer el ataque ‘despreciable’ que se registró primero en el monumento a los caídos y luego en el Parlamento en Ottawa, protagonizado por un hombre que mató a un soldado.

Según testigos, un individuo con una escopeta disparó contra el soldado, que montaba guardia delante de un monumento a los caídos, cercano al Parlamento. Agregaron que luego el sospechoso entró al edificio legislativo, ubicado a unos cientos de metros de distancia, donde se escucharon numerosos disparos.

La gente huyó valiéndose del andamiaje que había sido montado para hacer renovaciones en la fachada del Parlamento, otros se refugiaron en el interior, asegurando las puertas con sillas. La Policía canadiense no proporcionó detalles de cómo murió el atacante.

Publicidad

Harper fue sacado a salvo del lugar y el Parlamento fue cerrado. Testigos dijeron que al menos hubo 30 disparos.

Canadá elevó su alerta de terrorismo de baja a media el martes pasado, debido a “un incremento en las conversaciones de organizaciones radicales islamistas”, indicó Jean Christophe La Rue, vocero del Ministerio de Seguridad Pública.

El lunes pasado, un supuesto islamista atropelló a dos soldados canadienses, uno de ellos murió. La policía mató a tiros al agresor.