La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció este viernes que 4.033 personas han muerto como consecuencia del ébola en siete países, aunque la inmensa mayoría han fallecido en Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry, donde la epidemia empezó el pasado marzo.

El número de infectados registrados hasta el pasado día 8 de octubre es de 8.399, lo que representa 366 más con respecto al informe que la organización internacional divulgó hace dos días.

El anterior balance, hasta el 5 de octubre, señalaba 8.033 casos, incluidos 3.865 mortales. La OMS divide los siete países afectados en dos grupos, el primero compuesto por Guinea, Liberia y Sierra Leona, los tres países más afectados, y el segundo por Nigeria, Senegal, España y Estados Unidos.

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En el primer grupo, Liberia, lleva 4.076 casos registrados, de los cuales 2.316 mortales.

En Sierra Leona, la OMS registró 2.950 casos y 930 muertes, mientras que en Guinea, país en el que se originó la epidemia en diciembre de 2013, hubo 1.350 casos y 778 muertes.

El personal médico y sanitario continúa pagando un alto tributo en estos países con 416 casos, 233 de los cuales mortales.

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Del segundo grupo, Nigeria, se mantiene sin cambios con 20 casos y ocho muertos.

El último recuento de la OMS incluye un muerto en Estados Unidos y un caso en España. En Senegal también hay un solo caso hasta el momento.

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En República Democrática del Congo (RDC), azotada por una epidemia sin relación con la de África Occidental, la OMS registró 71 casos, de los cuales 43 mortales, según un balance hasta el 7 de octubre.