En dos buses de la Policía llegaron anoche a la Unidad de Flagrancia los jóvenes que fueron detenidos en los alrededores del colegio nacional Montúfar, presuntamente por enfrentar a la Policía con piedras. El jefe del Distrito Metropolitano, Ramiro Mantilla, confirmó que son 74 y que no todos son estudiantes de la institución.

Las madres de los jóvenes acudieron a esta dependencia para obtener noticias. Evelyn Venegas, madre de Dilan, de 14 años, aseveró que su hijo estaba en la tienda junto al colegio y que “los policías le sacaron a golpes, lo arrastraron y lo detuvieron”. Esto según vecinos.

Rosario Amagua contó que su sobrino estaba vendiendo manicho. “Le quitan la caja, la plata y le traen pegando. Me llama a decir que le han capturado; él no es estudiante, vende conmigo en la pasteurizadora”.

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Un grupo de estudiantes se tomó la avenida Napo (que comunica el sur con el centro de la capital) antes del mediodía. Un contingente de 100 policías acudió al colegio, pero no logró controlar a los estudiantes que lanzaban consignas en contra del Gobierno.

Hubo enfrentamientos y bombas lacrimógenas que afectaron a los habitantes de la zona y que buscaron resguardarse en sus viviendas. La refriega dejó seis uniformados heridos con piedras de los manifestantes, confirmó Mantilla.

El ministro de Educación, Augusto Espinosa, culpó de estas protestas al extinto Movimiento Popular Democrático (MPD) asegurando que “alrededor de 100 de sus miembros intentaron sembrar el caos”.

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Al cierre de esta edición, las organizaciones sociales indicaron que nueve activistas sociales fueron aprehendidos cuando participaban en la marcha en la plaza San Francisco.