Profesores ecuatorianos en España se preparan para postular a una plaza en el magisterio

Desde principios de agosto, una treintena de maestros se reúnen todas las semanas en el Centro Hispano Ecuatoriano del madrileño barrio de Arganzuela con un único propósito: el de conseguir una plaza para regresar al país con un empleo en el magisterio dentro de la convocatoria internacional del programa gubernamental 'Quiero ser maestro'.

El período de inscripción concluye este domingo y dentro de un mes arrancarán las pruebas de razonamiento. El grupo de estudio es una iniciativa de la Asociación de Profesores Residentes en España (Aprofere).

Un año atrás, los docentes se examinaron en el marco del plan piloto que puso en marcha el Gobierno. El balance no fue positivo: se inscribieron 781 personas, se examinaron 399, apenas 43 superaron las pruebas y solo 8 regresaron con un contrato.

Cuando el ministro de Educación, Augusto Espinosa, presentó en Madrid el segundo intento de reclutamiento, él reconoció que había un “anacronismo en los conocimientos de los postulantes” y por eso se planteó la posibilidad de que la embajada ecuatoriana emprenda un plan de “preparación intensa” a través de convenios con universidades españolas en los 13 consulados.

José Gualán, presidente de Aprofere, sostiene que hasta ahora no existen iniciativas en esta línea. “Nos hemos apoyado solo entre los compañeros de la asociación”, agrega este profesor de educación básica de primaria que perdió el trabajo hace 24 meses.

El año pasado los postulantes se enfrentaron a tres pruebas: de especialidad, de habilidades lingüísticas y sicométricas. El sistema de evaluación ha sufrido modificaciones. Ahora los aspirantes deberán superar primero dos tests, de razonamiento (del 14 al 25 de octubre) y de personalidad (del 28 de octubre al 8 de noviembre). La lista de los candidatos idóneos que se examinarán en las pruebas de conocimiento se publicará el 20 de noviembre. El 15 de diciembre se anunciará quienes pueden participar en los concursos de méritos y oposición.

De profesor a guardia de seguridad

Galo Chiguano impartía en Quito clases de matemáticas para alumnos de secundaria. En Madrid es guardia de seguridad.

Él se presentó a la primera convocatoria y volvió a inscribirse en la segunda. Chiguano quiere mejorar sus calificaciones. “Hemos tenido más tiempo para prepararnos y como ya tenemos experiencia en cómo son las pruebas, el resultado puede mejorar”, sostiene esperanzado.