Un grupo de desconocidos incendió en la madrugada de este jueves el palco de un centro cultural en que se iba a celebrar un polémico matrimonio entre homosexuales en la ciudad brasileña de Santana do Livramento, en la frontera con Uruguay, informaron fuentes oficiales.

El fuego destruyó el palco de la sede del Centro de Tradiciones Gauchas (CTG), organización dedicada a la preservación de la peculiar cultura de los habitantes del sur de Brasil, informó la Policía, que abrió una investigación por tratarse de un incendio premeditado.

Los directores del centro cultural venían recibiendo amenazas por su decisión de autorizar la inclusión de una pareja de homosexuales entre las 28 que se casarían en una ceremonia conjunta prevista para el próximo sábado.

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Inicialmente estaba prevista la inclusión de dos parejas homosexuales, pero la segunda desistió ante las amenazas.

Según testigos ya escuchados por la Policía, el incendio fue provocado por cuatro hombres que invadieron el centro cultural hacia las 00:30 hora local (03:30 GMT) de este jueves.

"Estamos intentando localizar a los sospechosos. Ya contamos con la descripción del vehículo y con datos que nos permiten identificar al propietario del automóvil", afirmó el comisario de la Policía Civil en Santana do Livramento, Eduardo Finn.

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"Sospechamos que fue un acto de vandalismo con el objetivo de amenazar, de atemorizar, un objetivo tal vez hasta ideológico. Pero los daños fueron sólo materiales", agregó el comisario.

Pese a la rápida actuación de los bomberos, el fuego destruyó el palco y parte de la edificación del centro cultural.

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Los directores del Centro de Tradiciones Gauchas afirmaron que, pese al ataque, a los daños y a las amenazas homofóbicas, intentarán habilitar el local para que el casamiento colectivo pueda ser realizado como estaba previsto.

La inclusión de parejas homosexuales entre las que se casan en el centro de preservación de las tradiciones gauchas fue propuesta por la directora del Foro de Justicia de Santana de Livramento, la jueza Carine Labres, para quien la unión entre personas del mismo sexo no afronta ninguno de los valores del tradicionalismo regional.

La decisión, sin embargo, dividió a los defensores de las tradiciones gauchas, algunos de los cuales manifestaron su oposición al matrimonio homosexual, y las amenazas terminaron por elevar la polémica.

"Quedó claro que la actitud (el incendio) configura un crimen de homofobia", aseguró en comunicado la Secretaría de Justicia y Derechos Humanos del estado de Río Grande do Sul, que condenó la posición homofóbica "de un pequeño grupo de personas".

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La legislación brasileña no prevé el matrimonio entre homosexuales, pero una decisión de la máxima corte del país en 2011 extendió a las parejas del mismo sexo el derecho a dejar constancia de su unión ante el Registro Civil.

En la práctica, el Supremo Tribunal Federal (STF) autorizó a las parejas de homosexuales a registrar su unión civil ante notarios o jueces, una iniciativa que por años estuvo paralizada en el Legislativo.