Hace 20 días la organización jurídica de Reyes y Reinas Latinos, o Latin King, le presentó al ministro del Buen Vivir, Freddy Elhers, una propuesta para prevenir el consumo masivo de drogas. “Se le entregó en sus manos un borrador, patentado por la organización, de un proyecto para la prevención del consumo de estupefacientes”, dice Jorge, Inca Supremo de los Latin King, título que lo ubica como líder máximo del grupo.

En el documento se propone capacitar a los padres para que puedan identificar en sus hijos algunos comportamientos relacionados con el uso de drogas. “A mí no me puede venir a hablar el presidente de drogas, cuando yo fui el que la consumí; cuando él no ha consumido, no me puede hablar”, dice Jorge para proponer que los jóvenes asuman la capacitación.

Su proyecto también contempla la creación de centros médicos públicos para la desintoxicación y rehabilitación de los adictos, la creación de espacios de terapia ocupacional y de microemprendimientos para ofrecer trabajo a los jóvenes.

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La organización Big Clan, dice Pablo, uno de sus dirigentes, también busca combatir el consumo de drogas y fortalecer el desarrollo de actividades de esparcimiento o recreación, pero piden que el Municipio construya espacios físicos para que ellos puedan expresarse. “Queremos más espacios públicos. Se han enfocado en hacer canchas y canchas, o piscinas; también hay gente que le gusta bailar”, reclama Pablo, miembro de la Federación Ecuatoriana de Hip Hop y representante de los Big Clan, en la mesa de concertación de Juventudes del Municipio de Guayaquil.

Los Ñeta, dicen sus líderes, también han dejado atrás las confrontaciones y buscan ayudar a los jóvenes miembros, o hermanitos, como les llaman.

“Acá se les da estudio, becas del Secap, de la Junta de Beneficencia”, explica Darío, segundo líder del capítulo (zona) San Martín de los Ñeta en la urbe.

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Ernesto Piechestein, coordinador de la Mesa de Concertación de Juventudes, agrega que otra de las demandas de los grupos legalizados es tener limpios sus antecedentes personales. “Lo que más piden es trabajo, pero muchos cayeron presos y no han podido limpiar su récord policial. Es un tema delicado, ¿cómo comprobar que no volverán a delinquir?”.

Los Latin King, Ñetas y Big Clan son algunas de las organizaciones urbanas que se legalizaron y que cuentan con miles de integrantes. Sin embargo, los mismos dirigentes reconocen que hay “disidentes” que han formado nuevos grupos o pandillas, algunos con fines delictivos o relacionados con el microtráfico de drogas.

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Jorge, líder de los Latin King, anuncia un posible plantón para que se los escuche. Este domingo analizarán la medida en un encuentro nacional.

20
Mil jóvenes pertenecen a organizaciones, según datos del cabildo.

Hemos venido hablando sobre el tema del hache, de la heroína, y del sicariato, hace cinco años, al presidente Correa. ¿Por qué no hacen caso? Queremos hacer un plantón”.Jorge, líder nacional de Latin King