Estados Unidos ha enviado a 130 asesores militares más al norte de Irak de manera temporal para reforzar la misión humanitaria de ayuda a los refugiados en el monte Sinyar, informó una fuente oficial del Departamento de Defensa.

Los soldados tienen la misión de ayudar a las cerca de 40.000 personas, en su mayoría yazidíes kurdos y cristianos, que se encuentran todavía atrapadas en el monte Sinyar y con necesidad urgente de agua, comida, refugio y medicinas.

En tanto, la Casa Blanca llamó ayer al primer ministro saliente iraquí, Nuri al-Maliki, quien se aferra al poder, a respetar el proceso democrático y ceder el cargo para permitir que su sucesor “una al país”.