La adolescente Gema C. G., de 13 años, sufrió una lesión cerebral al impactarse contra el pavimento mientras practicaba con un grupo de cheerleaders al que pertenece desde hace dos años, según sus familiares.

El hecho ocurrió la tarde del pasado sábado, indicó Fanny G., madre de la menor, quien explicó que luego de ese accidente su hija no reacciona, pero se mantiene estable tras la operación a la que fue sometida de urgencia el pasado domingo.

El golpe, según la progenitora, provocó que un hueso del cráneo se desprendiera por lo que se la operó en el hospital Verdi Cevallos, de Portoviejo, el tercer centro asistencial de Manabí adonde fue transferida luego de ser atendida preliminarmente en los hospitales Rafael Rodríguez Zambrano y el del IESS, ambos de Manta.

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Desde el pasado domingo, la mujer pasa la mayor parte del día en un mueble a pocos metros de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos de esta casa de salud junto con su esposo, John C., pendientes de la recuperación de la menor.

Los padres indicaron, según versiones de los médicos que la intervinieron, que salió bien de la operación, pero se espera que evolucione y reaccione en un periodo de siete a quince días, y que deberán realizarle otra cirugía en seis meses para poder ubicar una prótesis que reemplace el hueso que se destruyó con la caída.

Fanny G. admitió que desconoce lo que pasó con la última de sus tres hijas. Agregó que la instructora de Gema, Andrea D. Z., la llamó a las 16:30 del sábado para indicarle que se acercara al hospital de Manta, pues la niña habría sufrido una caída mientras ensayaba en la cancha de usos múltiples de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (Uleam) en Manta.

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“Me dice: Señora, venga vea a su hija que ha tenido un accidente, no se asuste que ella sí reacciona; pero no era así”, comentó Fanny.

Agregó que uno de los compañeros del grupo de cheerleaders denominado Black Jags, que estaba en la casa de salud luego del incidente, le manifestó que se sentía culpable por no haberla agarrado bien, pero reconoció que estaba muy cansado porque supuestamente el trabajo realizado en el ensayo fue extenuante.

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Los padres de Gema lamentaron que hasta ayer la instructora del grupo no se haya acercado a ellos, ni al hospital para saber el estado de su hija, por lo que no descartan seguir una acción judicial por una supuesta irresponsabilidad que se cometió a la hora de las prácticas.

Ayer se llamó al número celular de la instructora Andrea D. Z., pero no respondió.

Los padres dicen que no cuentan con dinero para comprar las medicinas, que en algunos casos superan los 100 dólares diarios.

Esta supuesta irresponsabilidad está causando dolor. Debe haber un control a estos grupos, que tengan asistencia médica y que hagan prácticas en lugares adecuados”.Laura S., familiar de víctima

Detalles
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No hay denuncia
Los padres de la menor dicen que aún no han presentado una denuncia por este hecho, mientras que en la Fiscalía de Manta hasta ayer no se confirmó si se ha iniciado alguna investigación.

Entrenamiento
El grupo de cheerleaders Black Jags practica en canchas de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (Uleam) y ha participado en eventos nacionales e internacionales.