El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, informó esta mañana que solo si es necesario y si los estudios así lo determinan, el Municipio podría intervenir en la reubicación de las familias que, viviendo a orillas del estero Salado, han resultado afectadas por el aguaje.

El Municipio podría reparar la casa, incluso desmontándola y poniendo los pilotes y volviéndola a hacer, o la necesidad de desmontarla y trasladarla, dijo.

Estas familias se vieron afectadas por el aguaje registrado la semana pasada, que hizo desbordar el estero Salado, inundando algunas viviendas que están en las riberas del brazo de mar, en sectores del suroeste de la ciudad. 

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Aclaró que los asentamientos ilegales son competencia del gobierno y no serán legalizados, y que la solución definitiva para evitar inundaciones en zonas de esteros y ríos le compete a la Prefectura y al Gobierno. "Como ellos mismo lo han indicado, dragar los ríos no es un problema de Guayaquil, es un problema de toda la cuenca del Guayas".

Entre los moradores de los sectores Cisne 1, Cisne 2, Plan Piloto, Cristo del Consuelo, Puerto Lisa y Guasmo existe el temor e incertidumbre por las acciones que se ejecutan dentro del plan Guayaquil Ecológico, impulsado por el Ministerio del Ambiente y que incluye la recuperación del estero Salado.

Transporte alternativo

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El alcalde Nebot señaló que este mes sería el proceso de contratación para el estudio de la primera ruta de transporte alternativo para Guayaquil, que va por aire; "es decir, no ocupa espacio en la tierra". El tema ya está en agenda en el Municipio, agregó.