Pese a que el proceso de llamamiento al acuartelamiento de la leva de 1995 se inició a las 08:00 de ayer, miles de jóvenes se ubicaron desde las 23:00 del viernes pasado en los exteriores del Centro de Movilización de las Fuerzas Armadas, en la ciudadela Atarazana.

Uno de ellos era Roger Candell, de 19 años, quien aspira a pertenecer a la Armada del Ecuador y buscaba uno de los 1.070 cupos que las Fuerzas Armadas destinó para la ciudad.

A las 09:00, Candell pudo ingresar a realizarse los chequeos médicos. A esa hora la fila de aspirantes se extendía hasta el hospital Roberto Gilbert, a seis cuadras del centro de movilización. Mientras otros jóvenes, en el exterior, se agrupaban en las puertas de ingreso, lo que impedía el acceso. El proceso se cumplió hasta las 17:00.

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Estos jóvenes, nacidos en 1992, 1993, 1994 y 1995, optaron por cumplir el servicio cívico militar voluntario que a partir de este año durará seis meses.

Fernando Vélez, otro de los acuartelados, considera que con la reforma de la preparación se exigirá más a los futuros conscriptos.

Durante el tiempo que dure el acuartelamiento recibirán formación a nivel militar, en seguridad integral, en valores y apoyo a la gestión de riesgos.

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Prioridad en el ingreso a universidades y escuelas politécnicas públicas, además de condiciones preferenciales en concursos de méritos y oposición serán dos de los beneficios que tendrán los conscriptos al culminar la instrucción militar.

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Repartos militares de diez provincias serán el lugar de formación de 1.070 jóvenes acuartelados. A nivel nacional ingresaron 5.000.