Campesinos de varios puntos de Azuay caminaron más de ocho kilómetros de ascenso hasta el centro del cantón. La carretera Girón-Pasaje se llenó de banderas y carteles contra la minería y en favor de la producción agrícola. La consigna: ‘resistencia’.

“Con la Constitución en favor del ambiente y de los guardianes del agua, pero con una justicia que castiga a sus defensores la única alternativa es resistir a los intereses extractivistas”, dijo Carlos Pérez Guartambel, quien se sumó a la marcha con sus compañeros de proyectos de agua de Victoria del Portete. Gustavo Aucay, de los sistemas de agua de la cuenca del Jubones, aseguró que este es el inicio de acciones.

Otros manifestaron su temor por el proyecto de ley de Uso y Ocupación del Suelo. “No es posible que desde Quito se disponga qué haremos con nuestras tierras comunales o con las que nos dejaron de herencia nuestros padres”, expresó Dorila Fajardo, dirigente de Asunción.

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En la jornada se recogieron firmas de respaldo a un manifiesto que se entregará a la Presidencia de la República, en el que, entre otros puntos, se condena la criminalización de la lucha social y se solidarizan con el pueblo de Sarayacu, Molleturo, Íntag y Victoria del Portete, que defienden la vida, el agua y luchan contra las transnacionales y la empresa nacional minera.