El tribunal octavo de Garantías Penales declaró este viernes culpables a dos de los veedores del caso Gran Hermano, una investigación a supuestos contratos de Fabricio Correa, hermano del Primer Mandatario, con el Estado.

Pablo Chambers y Gerardo Portilla fueron condenados a un año de prisión pese a que la Fiscalía pedía la pena máxima por falso testimonio.

Los magistrados declararon inocentes a los veedores José Quishpe y Víctor Hugo Hidalgo.

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La investigación de los veedores se basó en determinar el perjuicio que generó la contratación de empresas vinculadas supuestamente a Fabricio Correa con el Estado y que concluye que perjudicó al país en alrededor de $ 143 millones.

En el informe de esta investigación, entregado en febrero del 2011, los comisionados indicaron que el mandatario conocía de los tratos suscritos por su hermano Fabricio Correa. Esto fue negado por el presidente, que los demandó por perjurio.

Pablo Chambers, Gerardo Portilla, José Quishpe y Víctor Hidalgo fueron elegidos por el Consejo de Participación Ciudadana para integrar esta veeduría.

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Reacción de defensores

Ramiro Román, abogado de los exveedores, calificó a la sentencia de nula porque, a su criterio, se registraron varias irregularidades en el proceso.

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Dijo que el fallo será apelado hasta la última instancia ya que se dictó solo con el pedido fiscal y presidencial y no se escuchó a los testigos; entre ellos, el procurador Diego García, el contralor Carlos Pólit, el propio Fabricio Correa, y otros.

Ellos, señaló, debían hablar sobre el perjuicio de los contratos de las empresas supuestamente vinculadas a Fabricio.

El jurista recordó que el informe de los exveedores fue aceptado por el Consejo de Participación Ciudadana (CPC) y luego pasó a la Función de Transparencia, “y eso significa que debe haber un pronunciamiento que hasta ahora no se hace público”.

Román contó que esperará la notificación por escrito de la sentencia para analizar los recursos que presentará.

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En el caso de los dos liberados de culpa, Román esperará leer la "motivación de la sentencia" porque a ellos les han causado graves daños durante 2 años, dijo, obligándoles a medidas cautelares. "Los efectos han sido para esas dos personas y las familias de ellos".

"Chambers está claro que hay una consigna en su contra y la están cumpliendo. A Portilla el proceso lo ha afectado gravemente, no ha podido conseguir trabajo, lo han estigmatizado", refirió.